GERMAN BERRIOS Psiquiatra y catedrático de de la Universidad de Cambridge

“El concepto genio es de los más dañinos de la historia de la ciencia, siempre es un equipo”

Germán Berrios, en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.
photo_camera Germán Berrios, en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.

El catedrático de Epistemología de la Universidad de Cambridge German Berrios estuvo este fin de semana en el Cunqueiro  para participar en el XX Curso de Investigación en Psiquiatría organizado por la Asociación Galega de Psiquiatría. 150 expertos de toda España asistieron a su conferencia sobre el problema mente-cuerpo.
 

 ¿Cuánto pesa el cuerpo en los problemas de la mente?
Hay dos respuestas, una teórica y una práctica. En la vida diaria de los clínicos los enfermos nos muestran que hay una interacción de cuerpo y alma. Cambios en el cuerpo (una infección o un tumor cerebral) puede llevar a cambios mentales. Hay quien piensa que es bidireccional. Hay un grupo de enfermedades que en medicina llamamos psicosomáticas, donde cambios mentales de varios tipos (depresión, irritabilidad, susto) parece que afectan al cuerpo. Antes los trastornos psicosomáticos eran parte de la psiquiatría. En las últimas décadas se está desarrollando una especialidad nueva, la medicina psicosomática que investiga  como afectan esos cambios no solo al cerebro sino a todo el cuerpo. Desde el punto de vista teórico hay mucho debate. Una posibilidad es decir que cuerpo y mente son independientes y tienen medios de comunicarse, otros dicen que la mente es el cuerpo mismo y no hay distinción, y en el pasado  se dijo que la realidad incluyendo el cuerpo humano depende de la mente, que es lo único que existe.

¿Cómo influyen la cultura y la educación en estas dolencias?
De nuevo depende de quien hable. La psiquiatría americana nos dice que el cerebro es universal, que todos los seres humanos de cualquier color, grupo étnico, género, tenemos el mismo cerebro y las enfermedades son las mismas, aunque a veces pueden variar un poco en su expresión y se explica en términos culturales o de género. Por otro lado hay psiquiatras culturalistas, Europa está más en esta línea, que dicen que la cultura (hay unas 300 definiciones de cultura en este momento) penetra profundamente en la expresión de la enfermedad y con cierta frecuencia la produce. En este caso el hecho de que los cerebros sean los mismos en todo el mundo no tiene importancia, lo que cuenta es la cultura que es la que controla la expresión, el comportamiento, los sentimientos, las experiencias del mundo que tenemos. El debate está ahí.

¿Cuesta diferenciar la maldad de  la enfermedad mental?
La explicación de la maldad humana ha cambiado. Antes del Cristianismo se explicaba de una forma distinta dependiendo del grupo cultural. El Cristianismo intentó unificar la explicación en términos de pecado o en términos del demonio, y fue una explicación extremadamente aceptada, universal. Luego, cuando el mundo, particularmente Europa, empieza a secularizarse, a interesarse menos en explicaciones religiosas y más en las científicas aparecen nuevas explicaciones de la maldad, la crueldad, la violencia. Hay periodos históricos en los que se aceptó que era intrínseca al ser humano, que hay gente buena y gente mala y a la mala hay que matarla y la sociedad lo aceptó. A finales del XVIII o principios del XIX cuando empezó el control social se invita a la Medicina a dar una opinión sobre  las conductas humanas en general. Se incluyen todas las locuras, pero también otra conductas humanas como la maldad y la violencia y dependiendo de la clase social, el momento histórico y del crimen que se ha cometido comienza la pisquiatría forense a decir esto es enfermedad mental, esto no. Pero esto crea problemas a los investigadores. Digamos que hay 20 criminales de los peores y en 11 de ellos se ve que tienen un problema cerebral, encontramos la patología de la maldad. Entonces cogemos a mil personas aleatorias y vemos en 700 ese mismo rasgo cerebral, ¿Qué hacemos? ¿Los encerramos antes de que cometan un crimen?¿Podemos hace esa barbaridad confiando en las estadísticas y destruir la libertad humana?. Lo mejor es guardar esa información y estudiar a  esos 700. Si al cabo de 20 años se hacen criminales en ese momento la capacidad de la ciencia para predecir el futuro mejoraría un poco. Hay que tener cuidado con las teorías médicas de la mandad porque pueden amenazar la libertad humana.

¿Hubo algún autor que haya marcado la psiquiatría actual?
La psiquiatría del siglo XXI es muy parecida a la del siglo XIX, cuando nació. El concepto genio es de los más dañinos que tiene la historia de la ciencia. He dedicado 55 años de mi vida a la historia de la psiquiatría y no hay nadie que haya sido tan genial que haya cambiado las cosas, siempre representan a un grupo y todos contribuyen.

¿Ser filósofo le ayudó en su trabajo como psiquiatra?
Mucho. La psiquiatría, la química o la farmacología son paquetes de reglas, de normas, de prescripciones. La filosofía permite analizar el nivel constitutivo de cualquier disciplina. No todos los psiquiatras  lo necesitan, si te dedicas a ejercer y auudar a la gente aceptas el conocimiento que tu periodo te ofrece.

¿Que resultado le gustaría ver en la investigación en su campo?
Los fondos de investigación van casi todos a la nuerociencia, me gustaría que se apoyase la investigación conceptual filosófica porque hace bien a la psiquiatría, legitimiza conocimientos y revisa otros que en realidad son una moda.

¿Qué opina del área de salud mental del Cunqueiro?
José Olivares (el jefe de Psiquiatría del Complejo Hospitalario Vigués) fue mi alumno. Lo considero un psiquiatra de primera línea. Creo que tiene una mente privilegiada y que en Vigo han tenido la suerte de retenerlo porque es del nivel que podía estar trabajando en Cambridge, en Oxford o en Harvard, pero es tan fiel y leal a su país que se ha quedado. 
 

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