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Comienzan a expedir fes de vida para el bono social con vencimiento

Miembros del comité de huelga, ayer en el recuento.
photo_camera Miembros del comité de huelga, ayer en el recuento.

 Los funcionarios de Registro Civil comenzaron ayer a expedir fes de vida para las solicitudes de los bonos sociales de Fenosa con vencimiento a finales de mes. Esta circunstancia hizo que las oficinas volvieran a registrar un incremento de usuarios durante la jornada de ayer. 
Además, se han preparado los libros de familia que se solicitaron  para la Seguridad Social y que tienen también plazo de vencimiento.  Así, se dan salida a los trámites que llevan consigo un plazo determinado para el usuario con el objeto de que la persona no quede desprotegida en este sentido. 
La huelga indefinida ha coincidido con las reservas de matrículas para la escolarización, que también requiere de distinta documentación y que conlleva un plazo determinado.
La cola de espera del Registro es difícil de calcular por los propios trabajadores pero estiman un colapso importante ante la práctica paralización total de un servicio que es que mayor afectación tiene en la ciudadanía.
Fue precisamente los registros civiles objeto de movilización por parte de los huelguistas que esta semana ‘tomaron’ las dependencias con el objeto de protagonizar un encierro simultáneo en las siete grandes ciudades de Galicia.
En Vigo, cerca de un medio centenar de trabajadores se atrincheraron en las oficinas, ante la sorpresa de los usuarios que se encontraban en esos momentos haciendo cola para el mostrador, si bien su aventura apenas duró una hora, al ser desalojados por la Policía Nacional.
El propio juez decano dio la orden para desalojar dichas oficinas. Los jueces advirtieron que el derecho a la huelga no debe interferir en le interior de los juzgados por lo que se iba a impedir cualquier movilización o incidencia dentro de los edificios o las salas de vistas.
A lo largo de estos 45 días, los trabajadores de juzgados de Vigo han protagonizado diversas movilizaciones, desde el entierro de la Sardina en el fin del carnaval, hasta un 23F o una caravana de vehículos además de concentraciones y manifestaciones.
“No sé si voy a aguantar mucho más tiempo”, explicaba uno de los trabajadores ayer en servicios mínimos. “Confío en que pueda arreglarse el conflicto porque un mes y medio sin cobrar es demasiado para una familia”.
 

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