La reforma del antiguo Xeral se concentra ahora en los últimos pisos con la modificación de la estructura para que sea escalonada, como en el proyecto original
nnn La Ciudad de la Justicia no sólo se despojó de la cubierta verde para volver a ser una torre blanca, como en el proyecto original, sino que el edificio también recuperará otras características de la primitiva residencia sanitaria que se fueron perdiendo a medida que se convirtió en el Xeral y se le fueron añadiendo ampliaciones para dar mayor servicio. En concreto, ahora se trabaja en sus últimos pisos para adaptar la torre al que fue su primer perfil, a tenor del proyecto de rehabilitación del arquitecto vigués Alfonso Penela, quien también se ocupa de la dirección de obra. Según indicó un portavoz de la Vicepresidencia de la Xunta y Consellería de Xustiza, que financia la actuación, se trata de la retirada de una parte de la envolvente perimetral de las plantas superiores. Está prevista en el proyecto, y con ella el redactor del proyecto busca recuperar el escalonamiento de las plantas en su coronación, "con el fin de acercarse a la esbeltez preexistente en el edificio original previa a las ampliaciones que fue sufriendo a lo largo del tiempo".
PARA 2020
La Ciudad de la Justicia tiene un presupuesto total de ejecución que supera los 30 millones de euros entre la primera fase, de demolición interior, ya culminada, y la adaptación de espacios, en marcha. Según el calendario, a finales de año tendría que haber culminado la actuación, aunque el traslado se demorará varios meses, al menos hasta mayo de 2020 y se realizará por partes. La torre que seguirá marcando el perfil de Vigo concentrará todos los juzgados dispersos ahora por cuatro edificios y podrá acoger 55 unidades además de Policía o Instituto Medicia Legal, entre otras dependencias, y dispone de capacidad suficiente para poder recibir futuros servicios que se vayan creando. n
