Un millar de aficionados participaron en una nueva edición de esta iniciativa. La salida sirvió para rendir homenaje al club vigués Bici Verde, de Moutain Bike, por su treinta aniversario
Vigo volvió ayer, domingo, a demostrar que es una ciudad que ama la bici, un medido de desplazamiento que reclama su espacio. A Pedaliña, actividad que organiza A Golpe de Pedal y que cierra la programación de Vive Vigo en Bici, reunió a unos mil aficionados, de todas las edades, cifra que se había puesto la organización como meta al superar el pasado año la presencia de unas 800 personas.
Esta prueba no competitiva, planteada a la manera de ruta cicloturística por la ciudad de unas dos horas de duración, tuvo también su vertiente solidaria, ya que cada participante podía donar parte de su inscripción a la ONG Entreculturas para ayudar a los campamentos de refugiados sirios.
José Manuel Suárez, de A Golpe de Pedal, quiso mandar un mensaje a los vigueses para que se animasen a utilizar diariamente la bici, que calificó como “elemento de paz”.
En esta ocasión, A Pedaliña también sirvió para premiar, en la persona de su presidente Esteban Lorenzo, al Club Ciclista Bici Verde, pionero en Galicia en la difusión de la especialidad de Moutain Bike (MTB) y que el pasado año cumplió 30 años de historia.
El acto de salida, que tuvo lugar en la Porta do Sol sobre las 11 horas, contó con la presencia del alcalde de Vigo, Abel Caballero, quien recordó que ya están en marcha —concretamente, en la calle Venezuela— las obras del carril bici que unirá Samil y la Avenida de Europa con la Travesía y Buenos Aires.
