En total anonimato, el vigués que firma portadas de Marvel, inauguró una exposición retrospectiva en su ciudad
nnn Firma como ACO (Vigo, 1985), las siglas de su nombre y de sus apellidos. Aunque en sus comienzos sí desveló la identidad que hay detrás, ahora prefiere mantener el anonimato, por lo que ahí queda su apodo. Poco más se sabe de este personaje, celoso de su intimidad, que logró hacer suyo el halo de misterio que envuelve a sus personajes, superhéroes del cómic.
Este jueves volvió a casa con una exposición que recorre su trayectoria artística. Comisariada por Vítor Nieves, “Desde la sombra” permanecerá hasta el 23 de abril en Lab_In Gallery: “Con una obra tan amplia el criterio que seguimos para seleccionar los dibujos es estético, los organizamos en varios espacios separados por los personajes”.
Con 22 años llegó a uno de los mayores objetivos que puede aspirar un dibujante: firmar en portadas de Marvel y DC Cómic. Fue entonces cuando empezó a borrar datos personales. Actualmente no consta su domicilio actual, se especula que puede vivir por Girona. Tampoco se encuentra su biografía en el perfil de dibujantes de Marvel. Ni siquiera Vitor Nieves pudo dar cuenta de ACO. Su único contacto para montar la exposición fue el representante del artista. Sí se sabe que viene habitualmente a su ciudad, aunque de incógnito, por lo que no se descarta que estuviese presente en la inauguración del jueves. Su última aparición pública en Vigo fue en septiembre de 2015, en Banda Deseñada. Fue el invitado estrella de una sesión de firmas en las que no permitió que la prensa lo fotografiase. Para los amantes del cómic, lo que realmente importa es su obra y la fuerza de sus dibujos habla por sí misma. En una exposición, que con el título parece rendir homenaje a la actitud pública de su autor, hace un recorrido por sus personajes, desde que empezó a los 18 años hasta la actualidad, que tiene 32. Destaca Spiderman, que comenzó a dibujar desde niño y que fue el primer encargo de Marvel; o Midnighter, el superhéroe gay, casado con Apolo. “ACO revolucionó el mundo del cómic; sus fondos son círculos concéntricos y huye del viñeteado habitual, ofreciendo una explosión que parece caótico, pero demuestra su maestría en la composición”, concluye Nieves.n
