El Juzgado de Noia cuenta ahora con testigos "que nunca llegaron a declarar en sede judicial"
n n n El Juzgado de Instrucción número 2 de Noia acordó reabrir la causa iniciada en su día contra José Enrique Abuín Gey, conocido como el Chicle, por un presunto delito contra la libertad sexual contra la hermana de su mujer ocurrido en 2005, según informa el Tribunal Superior de Justicia de Galicia. En la actualidad, Abuín Gey está en la prisión de A Lama (Pontevedra) como autor confeso de la muerte de Diana Quer, la joven madrileña cuyo cadáver fue hallado en un pozo en el interior de una nave de Rianxo (A Coruña) el 31 de diciembre pasado tras 16 meses desaparecida.
La jueza ha decidido reabrir el caso al ver similitudes en el modus operandi entre estos hechos "y otros atribuidos indiciariamente al mismo sospechoso", lo que en su opinión refuerza los indicios de veracidad de la denuncia. Además, según indica el alto tribunal gallego, la jueza de Noia "cuenta con testigos que nunca llegaron a declarar en sede judicial", que ratificarían la versión de los abusos a la hermana de su mujer.
Fue el Juzgado de Ribeira número 1 quien dedujo testimonio de una parte de las investigaciones realizadas a consecuencia de la desaparición de la joven madrileña por si los hechos fuesen de interés del juzgado de Noia que en su día instruyó la causa y que ahora reabre. La Fiscalía, que entiende que los hechos no han prescrito, había solicitado la reapertura del caso.
Los hechos por los que se investiga ahora de nuevo a Chicle supuestamente ocurrieron en 2005, cuando su cuñada, hermana gemela de su mujer, tenía 17 años.
El pasado miñércoles, los padres de José Enrique Abuín Gey, alias el Chicle mostraron su convencimiento de que su hijo no actuó solo. "Eso está claro, el solo no lo hizo", dijeron en una entrevista concedida a la Televisión de Galicia.
"Cuando encontraron a la criatura, ya tuve que asumir el trauma. Estaba allí y él sabía donde estaba. El era consciente de algo, no se si de todo, pero de algo sí", afirmó el padre del Chicle. En hasta tres ocasiones durante la entrevista, los padres de Abuín Gey muestran su convencimiento de que no actuó solo en este crimen. "Yo sé que mi hijo no lo hizo. Ayudaría, pero él solo, no", asegura su madre.
Los padres del Chicle lamentan que lo más duro de esta situación es no ver a su nieta, por la mala relación que mantienen con la mujer de Abuín Gey. "Si queremos verla, tenemos que ir a un juzgado y pedirlo. Pero yo no quiero eso para ella", dice la madre del presunto asesino, que reconoce que la relación empeoró desde una llamada telefónica.n
