Greenpeace denuncia que Pontevedra es el punto 'más contaminado' de la comunidad gallega debido a la industria papelera y del cloro

Galicia es la cuarta comunidad con mayor número contaminación debido a Ence-Elnosa, Repsol, Sogama y Cosmos

Galicia es la cuarta comunidad autónoma de toda España con mayor número de puntos de contaminación debido al complejo de Ence y Elnosa, Repsol, Sogama y Cosmos, y se sitúa sólo por detrás de País Vasco (25), Cataluña (18) y Andalucía (15), según denunció Greenpeace.

Según el informe presentado hoy por la asociación ecologista en Barcelona, la Comunidad gallega cuenta con dos puntos negros en Lourizán, en la Ría de Pontevedra, que cuenta con las instalaciones de Elnosa y del Grupo Empresarial Ence.
Asimismo, señaló como puntos negros a la Refinería de Repsol, ubicada en A Coruña; la incineradora de Sogama, en Cerceda (A Coruña); y la Cementera de Cementos Cosmos, en el municipio lucense de Ourol.

INDUSTRIA PAPELERA, LA 'MÁS CONTAMINANTE'.

Precisamente, el informe de Greenpeace, recabado por Europa Press, indica que la industria papelera y del cloro en Galicia 'tiene un peso importante', por lo que Pontevedra 'es el punto más contaminado' por los vertidos procedentes de este tipo de instalaciones.

Asimismo, Sogama, que quema residuos urbanos, genera cenizas y escorias tóxicas, así como dioxinas y furanos que 'tardarán años o décadas en degradarse', y que se acumulan en en todos los organismos de la cadena alimentaria. Al respecto, Greenpeace denunció que esta práctica tiene 'el inconveniente' de incorporar el cemento a sustancias peligrosas y genera una 'contaminación atmosférica por partículas en suspensión que llevan adheridos materiales pesados'.

En cuanto a la industria del petróleo, Greenpeace destacó que la refinería coruñesa entraña una fuente 'importante de derrames al mar', lo cual se une a que Galicia 'es la zona más castigada por el intenso tráfico marítimo y los vertidos de petróleo'. De hecho, Greenpeace mencionó algunos de los accidentes 'más graves', entre los que se encuentra el Urquiola, el Mar Egeo o el Prestige.

ALTERACIONES GENÉTICAS.

Asimismo, Greenpeace reiteró que 'se ha demostrado' que en catástrofes como las del Prestige, los PAHs fueron el principal elemento contaminante de la costa gallega. Sobre ellos, la asociación ecologista advirtió de que 'tienen impacto en la salud humana' y que ocasionan daños en el material genético, produciendo alteraciones teratogénicas, mutagénicas y carcinogénicas.

A mayores, también se detectó la existencia de metales pesados en el Parque Nacional de las Illas Atlánticas y en la Bahía de Corme y Laxe, que 'aparentemente' no están produciendo efectos biológicos de tipo agudo, 'lo que no descarta efectos a largo plazo'.

OTRAS COMUNIDADES.

Por detrás de Galicia, las comunidades con puntos negros se distribuyen de la siguiente manera: Aragón (4), Cantabria (4), Castilla-La Mancha (4), Valencia (4); Castilla y León (3), Asturias (2), Ceuta y Melilla (2), Extremadura (2), Islas Baleares (2), Murcia (2), Islas Canarias (2) y Navarra (1).

De este modo, Greenpeace lamentó también que el sector de la incineración está 'muy implantado' en la comunidad catalana, ya que es la que cuenta con más incineradoras, con un total de cinco y la única planta 'que quema residuos tóxicos y peligrosos' en Constantí (Tarragona). Añadió que existen dos cementeras donde se incineran residuos, una técnica que provoca 'serios problemas' ambientales.

Explicó que otros puntos de contaminación son las dos refinerías que hay en Tarragona y las 'únicas' tres plataformas de extracción de crudo, que están frente al delta del Ebro. Por todo ello, aseguró que la tasa de mortalidad por cáncer de encéfalo y mieloma 'es superior a la media nacional' en la zona.

CAMPAÑA '¿QUIEN CONTAMINA?'.

Greenpeace incidió hoy en la campaña '¿Quién contamina?', que llevará a uno de sus buques a recorrer la costa española señalando a los principales responsables de la contaminación en España.

La organización informó que la industria española reconoce el vertido de 1.219.709 toneladas de contaminantes anuales al agua, en referencia a 44 de las miles de sustancias peligrosas que existen. La contaminación atmosférica provoca en España 16.000 muertes prematuras al año, según datos del Ministerio de Medio Ambiente, recordó Greenpeace.

El estudio de la entidad ecologista se centra en los tres sectores que más contribuyen a la contaminación ya que, según datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente, el 41,4% de la contaminación de suelos es consecuencia de la producción industrial, el 15,2% a los vertidos y el tratamiento de residuos urbanos y el 14,1% a los hidrocarburos.

4 MILLONES DE ESPAÑOLES EXPUESTOS A SUSTANCIAS CANCERÍGENAS.

En cuanto a los vertidos industriales, aseguró que casi cuatro millones de trabajadores españoles están expuestos a sustancias cancerígenas y se estima que unos 4.000 mueren anualmente por la exposición a sustancias químicas, unos 36.000 más enferman y 18.000 sufren accidentes laborales, según el informe del Instituto Sindical de Trabajo, Ambiente y Salud. Además, las zonas con mayores tasas de afectados por cáncer 'coincide con las áreas más industrializadas', entre las que están Catalunya, Huelva, Cádiz y el País Vasco.

La organización consideró que el modelo de gestión de residuos es 'un fracaso' y destacó que la incineración y el uso de cementeras son dos fuentes de contaminación importantes. Además, señaló que el 12% del petróleo que llega al mar es resultado de grandes mareas negras, mientras que el 88% restante se vierte al mar de manera intencionada en labores de limpieza, desde fuentes terrestres o por la recarga de combustible en el mar desde un barco cisterna.

En comparación con otros países europeos, algunos de los casos de contaminación que se dan en España 'se sitúan entre los más graves del planeta'. Entre ellos, Greenpeace situó los vertidos en el río Ebro en Flix (Tarragona) y la contaminación por hidrocarburos en la Bahía de Algeciras.

La organización consideró que esta situación podría solucionarse 'si las administraciones públicas no fueran tan permisivas con quienes contaminan y aplicasen los controles marcados por la ley'. Los ecologistas afirmaron que la contaminación es resultado de políticas industriales, de residuos y de transporte 'muy laxas y cómplices con la industria'.

Por todo ello, reclamó la creación de una Agencia de Control de la Contaminación para garantizar el cumplimiento de las leyes, el cambio del modelo de gestión de los residuos 'que ni esconda las basuras, ni las queme' y apostó por el modelo de 'residuo cero', que exige a los fabricantes asumir el coste de la recogida y eliminación segura de sus residuos y a apostar por la reutilización y el reciclaje.

Además, consideró necesaria la implantación de un nuevo régimen de responsabilidad 'ilimitada' para la industria petrolera y establecer un régimen especial de vigilancia, control y sanción en la Bahía de Algeciras y Gibraltar.

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