economía

Un sistema con sello vigués evita atropellos mortales en las factorías

El equipo emite un aviso al detectar al operario en zona verde, aminora en la amarilla y se detiene en la roja.
photo_camera El equipo emite un aviso al detectar al operario en zona verde, aminora en la amarilla y se detiene en la roja.

En Vigo y la provincia fallecieron el año pasado 18 personas trabajando, el 40% en industria y construcción

En 2017 fallecieron 43 personas en Galicia desempeñando su puesto de trabajo, 18 de ellas en Vigo y la provincia, que tiene los datos más elevados de la comunidad, según el último informe disponible del Instituto de Seguridad y Salud Laboral de Galicia. En España fallecieron 108 personas y hubo 278 accidentes de carácter grave, según los datos del Ministerio de Trabajo.
El sector industrial y la construcción concentran las peores cifras (el 40%), debido a la presencia de maquinaria pesada, mucha de ella móvil, que pone en riesgo diario la vida de los operarios.
En este segmento de mercado introduce la empresa GTG Ingenieros un equipo que se instala en este tipo de máquinas, como los toros elevadores de palets, que es capaz de detectar a operarios en un radio de 40 metros de distancia y activar una serie de mecanismos que eviten un accidente laboral.
"Todo el mundo habla de industria 4.0 y nadie lo hace de seguridad, por eso en la empresa desarrollamos este proyecto diferente", señala Pedro García-Trejo, director gerente de la firma de ingeniería.
Este equipo, denominado técnicamente ATR Pro, "puede ser instalado en elementos con ruedas, como carretillas, vehículos autoguiados o camiones de logística para carga y descarga", señala García. El equipo no solo evita accidentes con operarios sino también entre los propios vehículos.
El sistema ofrece detección de 360 grados, como una esfera alrededor del vehículo, y tiene tres niveles de seguridad. En el primer nivel, a 40 metros de distancia, emite una señal que funciona como aviso para el operario. El segundo nivel, ya a 15 metros, implica que la máquina reduzca su velocidad y al llegar al tercer nivel, se para automáticamente.
"El sistema es configurable y se puede personalizar en funcionar de las necesidades del cliente", señala el director gerente de GTG Ingenieros, que también señala que no es necesario "instalar repetidores dentro de la fábrica".
GTG Ingenieros está instalado en Porto do Molle y cuenta con una plantilla de 20 personas, el 80% ingenieros, que forman parte del departamento de Investigación y Desarrollo.
La empresa echó a andar hace 20 años y siempre centró su trayectoria en la seguridad laboral. "No lo hicimos por una idea esporádica, a medida que avanzábamos en ingeniería industrial nos encontrábamos con maquinaria que necesitaba un estudio de seguridad y que no se contemplaba", señala García, que explica que este proyecto funciona solo a través de técnicas inhalámbricas y que puede trabajar en fábricas con campos magnéticos.

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