Numerosas personas se manifestaron ayer en las principales ciudades gallegas para mostrar su rechazo a la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana, que todavía no ha sido aprobada definitivamente.
La marcha, convocada por la Alianza Social Galega, congregó a un gran número de personas en Vigo donde los líderes sindicales recordaron los "cientos de procesos judiciales" que hay en la comunidad gallega en estos momentos por participar en manifestaciones en contra de las "políticas regresivas y antisociales" del PP. Así, pusieron como ejemplo el caso de los vigueses Carlos y Serafín, condenados a tres años de cárcel por participar en un piquete de una huelga del transporte en la ciudad.
La manifestación partió de Vía Norte y finalizó en Porta do Sol y contó con la presencia de colectivos como los afectados por las participaciones preferentes o los emigrantes retornados. Los sindicatos mostraron su rechazo a la ley que busca "criminalizar, reprimir y evitar la contestación social en la calle", según indicaron.n
