Durante la crisis la exportación ha sido el motor de la economía y en Galicia ha alcanzado cotas históricas de crecimiento, hasta los 18.400 millones de euros del año 2013. Sin embargo, el motor se está frenando y de enero a agosto de este año las ventas al exterior de la comunidad acumulan un retroceso del 0,7%, hasta 11.600 millones de euros.
El principal responsable es Vigo y la provincia de Pontevedra, que acaparan el 47% de las ventas de productos que salen de Galicia al extranjero. La provincia acumula un retroceso en los ocho primeros meses del año del 0,2%, hasta 5.507 millones. También A Coruña tiene su parte de responsabilidad, ya que cae un 4,7%, hasta 4.978 millones.
La caída de producción del sector de la automoción de un 3% entre enero y agosto es la principal explicación de estos datos. La planta de PSA Peugeot Citroën vive un año de transición en el que ha rebajado la cadencia de producción ante la falta de dinamismo de los principales mercados donde exporta: Europa. Además, se encuentra a la espera de que la central, París, le asigne nuevos modelos. Junto a ello una menor producción de energía, que acumula una caída del 15% en las ventas al exterior de la provincia de A Coruña.
Pero a cambio de estas malas noticias parece que las importaciones denotan una recuperación del consumo interno, que se constata en otros indicadores, como las ventas de coches. En Galicia las importaciones avanzan un 6%, hasta los 9.700 millones de euros, y en Vigo y la provincia de Pontevedra un 30%, hasta 4.350 millones, hasta agosto.
"El freno que han experimentado las exportaciones de enero a agosto, junto con un cierto retraso en la recuperación de la demanda interna regional, suponen que el dinamismo sea menos que el esperado hace seis meses", explica BBVA Research en su último informe sobre la situación de Galicia.
Así, y aunque las previsiones apuntan a un crecimiento de la economía gallega del 1,2% en 2014 y del 2,2% en 2015, estas cifras suponen tres décimas menos que en el informe que el servicio de estudios del BBVA realizó a principios de año.
En este sentido explica que a pesar del entorno internacional más complejo, en Galicia la reducción de la incertidumbre ha continuado y la demanda interna ya no supone un lastre para el crecimiento. Ahora sólo falta por ver cómo avanzarán las exportaciones, que responden fundamentalmente al avance de los socios comerciales europeos.
