El presidente de Ceaga admite que Vigo tenía más posibilidades que Trnava pero la próxima vez "será más complicado"
El sector de componentes de automoción de Galicia aspira a tener más peso en las piezas que fabrica para la planta de PSA Peugeot Citroën de Vigo. “Hoy en Galicia se hace más del 50% de las piezas de los vehículos” explicó el presidente del Clúster de Empresas de Automoción de Galicia (Ceaga), Luciano Martínez Covelo, pero para el K9 (las nuevas furgonetas que se acaban de adjudicar a Vigo) “podríamos hacer, sin apenas inversión, 150 piezas nuevas que supondría un 10% más, pasando al 60% de aportación gallega”. Como plazo, el clúster de la automoción de Galicia se ha fijado "de aquí a junio", "a partir de ahí será la adjudicación por parte de PSA", precisó.
Martínez Covelo participó ayer en una jornada de la reunión del Foro Económico de Galicia en A Toxa y ofreció una ponencia junto al profesor de la Universidad de Vigo Jesús F. Lampón sobre las claves de futuro para la automoción gallega. El presidente de Ceaga destacó que aunque PSA es muy importante para el sector de componentes, en los últimos cinco años la dependencia se ha reducido de forma que de las ventas totales del sector un tercio es para PSA, otro tercio para la exportación y el tercio restante para otros constructores.
Sobre la reciente adjudicación de las nuevas furgonetas K9 a la planta de PSA Vigo, Luciano Martínez Covelo admitió que “Vigo tenía muchas posibilidades” frente a la planta eslovaca de Trnava, pero que “el próximo coche va a ser más complicado porque todos van a mejorar y mucho”.
El profesor Jesús Lampón explicó que seis son las plantas que compiten directamente con Vigo porque tienen la misma plataforma EMP2, Rennes, Mulhouse y Sochaux en Francia, Kaluga en Rusia, Wuhan en China y Buenos Aires en Argentina.
Ceaga empezará en septiembre la elaboración de un nuevo plan estratégico para los próximos cuatro años, adelantó su presidente. Para Martínez Covelo los objetivos del sector pasan por una mayor internacionalización de las empresas, sin dejar de atender a PSA; mejorar la logística, que supone un coste entre el 15 y el 18%, similar al del personal; la innovación, “para ser dueños de nosotros mismos” y la flexibilidad “pero no sólo de personal, en todos los sentidos, también de organización o comercial”. n
