El presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, anunció ayer su propuesta de que la Supercopa de España volverá a jugarse en el extranjero –la pasada edición se disputó en Tánger (Marruecos)– y que cambiará de formato.
El ente federativo apuesta por una competición al estilo 'Final a cuatro', con la participación de los dos primeros clasificados de la Liga y los dos finalistas de la competición copera.
En total se disputarían, en un mismo escenario, tres partidos: dos semifinales y una final. En el caso de que exista coincidencia con los ganadores de las competiciones domésticas, se tendrá en cuenta la clasificación histórica de la Copa del Rey, según dijo Rubiales, por ser la competición que organiza la Federación Española, pero no aclaró cómo.