El técnico catalán valoró la reacción de su equipo en la segunda parte
El técnico del Córdoba, Albert Ferrer, se mostró satisfecho por la reacción de su equipo en la segunda parte, si bien admitió que no le gustó "nada" el primer tiempo de los suyos.
"Me voy con buenas sensaciones, pero hay que arreglar lo del principio. El equipo estaba atenazado y con falta de confianza, pero es el peaje que hay que pagar", asumió el máximo responsable del cuadro andaluz, recién ascendido a la máxima categoría.
El ex futbolista del Barça cree que sus pupilos necesitan confiar en sí mismos para alcanzar la permanencia. "Si no creemos en nosotros no vamos a ningún sitio, por eso cuando mandé ese mensaje el equipo reaccionó. En la primera parte no se estuvo nada bien, pero en la segunda parte se mejoró", recalcó el preparador catalán.
Así las cosas, Ferrer destacó que acabó el partido "satisfecho porque se reaccionó en la segunda parte ante un rival con más pretemporada". En este sentido, el técnico del cuadro andaluz cree que resultó clave que "se metió más balón por dentro", de modo que se vio "lo que se quiere hacer".
Por otro lado, el ex internacional español destacó el mérito de la reacción que tuvo su equipo tras un primer tiempo en el que fue claramente inferior al Celta. "Es muy difícil darle la vuelta a un partido después de la primera parte que se hizo, pero en el fútbol no vale de nada lamentarse, hay que reforzar lo bueno y el Córdoba siempre fue positivo", señaló Ferrer, que en el descanso pidió a sus pupilos que fuesen "más valientes".n
