Roberto Rodríguez puede predicar con el ejemplo. El tenista es profesor en el Club de Campo de Vigo, pero mantiene su toque de muñeca y su rendimiento sobre la pista.
De hecho, la pasada semana disputó la final del Campeonato del Mundo para veteranos (+35 años), en la que conquistó la segunda posición tras perder en la final con Holanda.
"Teníamos la esperanza de ganar un individual y jugarnos el desempate en el partido de dobles", admitió Roberto Rodríguez. El torneo, disputado en Croacia, tuvo un formato parecido al de la Copa Davis. El equipo español tenía la intención de ganar un punto en los enfrentamientos individuales y tratar de imponer su calidad en el doble, pero no llegó a lograrlo. La selección de Países Bajos fue mejor sobre la pista y ganó de forma contundente.
"Es una ocasión especial. Nunca sabes si vas a volver a estar seleccionable ya sea por motivos laborales o por capacidad competitiva", indica Roberto Rodríguez. Y es que el jugador tiene que compatibilizar los eventos de veteranos con su actividad en el Club de Campo de Vigo.
Además, Roberto Rodríguez es una de las referencias del tenis gallego a nivel absoluto porque "me dijeron que por qué no participaba en el torneo gallego de veteranos y llegué a la final sin entrenar. Ahí perdí con Miguel Casal". De hecho, Casal ganó el título absoluto hasta en catorce ocasiones. En trece lo hizo de forma consecutiva hasta que llegó su rival íntimo. Porque "entrenamos juntos. Somos amigos".
De esta forma, las pistas del Club de Campo acogen a los mejores tenistas de Galicia y, además, uno de ellos está entre los mejores del mundo en + 35 años. Lo disfrutan, o padecen, sus alumnos.n
