El fallecimiento del dirigente vigués, que llevaba unos días enfermo, causa conmoción en el mundo del deporte
Paco Araújo, presidente del Celta Bosco de baloncesto femenino, falleció a los 53 años de edad por causas que todavía se desconocen. El dirigente vigués llevaba varios días enfermo debido a una bronquitis y ayer fue encontrado muerto en su domicilio por un familiar. Su cuerpo fue trasladado al hospital Nicolás Peña para la correspondiente autopsia y la familia decidía anoche el lugar donde descansarán sus restos mortales.
Araújo entró en el Celta Bosco en 1996 y en 2001 se hizo cargo de la presidencia tras la muerte de Gómez Carballo y Camilo Pérez en un accidente de tráfico.
José Manuel Gómez Carballo, presidente del Club Deportivo Bosco a fines de los años 80, convenció a Paco Araújo para que entrase en el baloncesto. Amigos íntimos, Carballo lo anunció para la junta directiva del Bosco cuando éste era club masculino, pero aquel le dijo que no. No le interesaba, aunque suyas fueron algunas gestiones de patrocinio para el club.
Tras un corto paso de ambos por el Real Club Celta de fútbol, Carballo, tan insistente como sutil, volvería a la carga y, ya cuando él había entrado en la directiva del C.B. Vigo de baloncesto femenino, logró convencerlo para que conociese esta modalidad. Carballo se salía con la suya. La salida de ambos del Vigo en el verano de 1996 no era para dejar de lado al deporte que acabaría amando: recuperaban el nombre del Bosco, inactivo desde 1991 cuando murió de éxito (ascenso a 1ªB, la actual LEB Oro, pero sin posibilidades económicas de disputarla), compraban por tres millones de pesetas la plaza del Juventud Astur de Oviedo y salían en Liga Femenina.
Entre 1996 y 2001, Vigo se puso a la cabeza del baloncesto femenino nacional. Una final de Copa de la Reina disputada (1996) tras doce años sin que ningún equipo vigués la alcanzase, una final de Liga (1998) y tres títulos en fila: Liga (1999 y 2000) y Copa (2001). El Celta se permitía fichar a una WNBA (Betty Cebrián) y firmaba jugadoras internacionales. Araújo, vicepresidente económico, era el hombre de los números. Con un gran patrocinador portugués, la Caixa Geral de Depósitos, que había comprado el banco Simeón, Vigo mandaba y Araújo se ganaba el apodo de 'Terminator' entre los directos adversarios por el título.
Los éxitos del club también fueron sociales: Carballo y Araújo convencían a Horacio Gómez para que en 1998 el Bosco pudiese utilizar el nombre del Celta y su equipación celeste. El fútbol había contado en los años 40 con sección de baloncesto de modo esporádico y de forma constante entre 1969 y 1988, cuando la liquidó José Luis Rivadulla.De hecho, el Celta llegó a sondear a Araújo para la gerencia del club de fútbol, aunque finalmente la idea no prosperó. Carballo y Araújo, en fin, eran el tándem perfecto… que el 21 de marzo de 2001 se truncaba en la carretera, cuando fallecían en accidente de tráfico el presidente y el vicepresidente Camilo Pérez, un directivo que llevaba un año en el cargo.
A partir de ahí Araújo asumiría la presidencia. Varias veces comentó su deseo de dejar el club pero nunca ejecutó ese pensamiento. Vigo iría perdiendo fuelle deportivo pero siempre mantuvo su espíritu competitivo y unas cuentas reales que en 2011 aconsejaron el descenso voluntario a Liga Femenina 2. Paco Araújo no concebía una entidad deportiva morosa y prefirió mantenerla un escalón por debajo a la espera de mejores tiempos. Este verano, el nuevo Celta Bosco cumple veinte años, pero ya sin sus impulsores.
La muerte de Paco Araújo se produce justo un año después de la desaparición de otro baluarte del deporte vigués, el presidente del Amfiv, Pablo Beiro.
Araújo, en la presentación de una temporada en la Liga Femenina.
