VALENCIA-CELTA

Una historia de talento y fe

Los jugadores del Celta celebran el primer gol del partido de ayer en Mestalla contra el Valencia, obra de John Guidetti.
photo_camera Los jugadores del Celta celebran el primer gol del partido de ayer en Mestalla contra el Valencia, obra de John Guidetti.

El Celta supera al Valencia con dos tantos de Guidetti y Mallo en un duelo parejo que pudo acabar en goleada

El cóctel que va camino de llevar al Celta a Europa tiene muchos ingredientes, pero por encima de todos ellos sobresalen el talento y la fe. El talento de futbolistas capaces de engendrar un gol como el 0-1 de ayer en Mestalla, que nació de esas botas llenas de arte de Nolito y culminó con un buen remate de Guidetti previo taconazo del siempre genial Orellana. La fe de futbolistas capaces de resistir en los buenos y malos momentos de un duelo muy parejo que no se decidió hasta la recta final. La fe de futbolistas como Hugo Mallo, un capitán de los que honran el brazalete, que ofreció una demostración de calidad, fuerza y convicción en la acción del 0-2, que de nuevo inicia Nolito y continúa con otro taconazo, esta vez cosecha de Planas, para que el capitán noquease a un Valencia entregado a partir de entonces. Pudo incluso golear el Celta en los compases finales, pero el 0-2 basta para dibujar una sonrisa en un horizonte en el que ya no hay cabida para los pesimistas. El equipo de Eduardo Berizzo es quinto, tiene nueve puntos de ventaja sobre los puestos no europeos e incluso se ha acercado a sólo seis del Villarreal, que marca la frontera de la Liga de Campeones.
Hay mil razones para creer en este Celta que en Mestalla vistió verde esperanza. Esperanza que ya ni siquiera necesita su afición. Basta con abrir bien los ojos y disfrutar de una temporada histórica repleta de barreras que el equipo vigués ha ido superando casi sin inmutarse. Porque el 0-2 de ayer no debe bastar para olvidar que el Celta se plantó en Valencia sin Fontás, Pablo Hernández, Iago Aspas y Radoja, cuatro futbolistas de peso en una plantilla tan corta el 'Toto' Berizzo se vio obligado, una vez más, a recurrir a dos jugadores todavía en edad juvenil como Diego Alende y Pape Cheikh para completar la convocatoria.
Al menos, los celestes afrontaban el encuentro en un buen momento, empujados por su privilegiada situación en la tabla tras sumar 10 puntos de los últimos 15 posibles y descartar a un aspirante a la pelea europea como la Real Sociedad la semana pasada en Balaídos. Poco que ver con un Valencia que enterró el jueves su última esperanza al ser eliminado de la Liga Europa por el Athletic y que también afrontaba el choque de ayer con bajas sensibles como las de Parejo, Enzo Pérez, Bakkali, Cheryshev, Santos o Cancelo. 
La única razón para el optimismo 'che' era el buen partido completado por los pupilos del discutido Gary Neville frente al Athletic, al que de hecho derrotaron 2-1 y estuvieron a punto de tumbar tras el 1-0 de la ida en San Mamés, y la resaca del duelo continental pareció llevar en volandas a los valencianos durante los primeros minutos de un encuentro que resultó muy abierto de inicio. Fundamentalmente porque el Celta no renunció a su idiosincrasia pese al empuje de los locales y convirtió el choque en una ida y vuelta en la que el excéltico Rodrigo Moreno –titular junto a Santi Mina, otro fruto de A Madroa– dispuso de la primera ocasión al conectar un remate, tras un mal despeje de Sergio, que Cabral sacó bajo palos.
Durante muchos minutos, el Valencia fue mejor que un Celta que echaba de menos el balón. Sin la posesión, los chicos de Berizzo se sienten perdidos. Y ayer el balón le duraba apenas unos segundos. Es en esos momentos en los que se aprecia el proceso de maduración experimentado por el Celta en las últimas temporadas. Si otrora dejaba escapar los partidos a la primeras de cambio, hoy es capaz de resistir en los peores instantes a la espera de su oportunidad, que ayer llegó en cuanto recuperó el tacto con el cuero.
Mediado el primer tiempo, la balanza se inclinó del lado celeste. Bajó el ritmo el Valencia y entregó el balón a los celestes, que lo aprovecharon para lucir caudal ofensivo. A punto estuvieron de adelantarse en el marcador tras un pase en profundidad de Orellana que Hugo envió al corazón del área, pase que Mustafi cortó para estrellar en el palo de su propia portería un balón que Ryan salvó sobre la línea. Wass y Beauvue protazonizaron una doble oportunidad y Orellana volvió a aparecer en una buena jugada con Jonny antes de que una pérdida del lateral vigués propiciase una contra del Valencia que culminó en gol (bien) anulado a Paco Alcácer.
La aparición del internacional 'che', atinado en casi todo lo que hace, amedrentó en la recta final del primer tiempo a los vigueses, que recularon y vieron como Rodrigo, Siqueira y Santi Mina probaban ante la portería de Sergio antes de que Undiano Mallenco –que perdonó más de una tarjeta– señalase el camino a vestuarios.
Tras el descanso, el conjunto de Gary Neville se hizo con el control del partido. Salió con más fuerza que el Celta y dispuso de oportunidades para marcar. Danilo probó fortuna con un potente disparo desde la frontal que se marchó desviado por poco y Rodrigo Moreno obligó a intervenir en dos ocasiones a Sergio, que volvió a mostrarse acertado en su cuarto partido seguido sin encajar un solo gol.
El Celta, una vez más, supo resistir una tormenta que pasó cuando Berizzo reforzó el centro del campo dando entrada a Pape Cheikh en lugar de Beauvue. El equipo vigués pasó a jugar con un 4-3-3 y aprovechó el bajón físico del Valencia para recuperar el balón y, a partir de ahí, inclinar el partido hacia la portería de Ryan.
El conjunto celeste se adueñó del partido en la recta final. Jonny rozó el gol en una buena internada que culminó estrellando el balón en el palo poco antes de que Neville enojase a su propia afición sacando del campo a Alcácer, el mejor futbolista 'che' sobre el césped de Mestalla. El enfado de la hinchada local fue 'in crescendo', ya que segundos después Nolito se inventó un pase genial hacia el área que Orellana dejó de tacón para que Guidetti batiese a Ryan.
El sueco, con una pequeña contractura, pidió el cambio, pero la avalancha celeste ya era imparable ante un Valencia con diez hombres sanos por la lesión de Gayá sin cambios por hacer. De un nuevo servicio de Nolito hacia Planas nació el 0-2, obra de Mallo en una extraordinaria demostración de fuerza y calidad, y tanto Wass como Orellana dispusieron de claras ocasiones para que el partido acabase en una goleada que no llegó.

El céltico Claudio Beauvue cabecea el balón ante el valencianista Danilo. El delantero de Guadalupe lució juego aéreo, pero le costó brillar con el balón sobre el césped.

El céltico Claudio Beauvue cabecea el balón ante el valencianista Danilo. El delantero de Guadalupe lució juego aéreo, pero le costó brillar con el balón sobre el césped.

Valencia: 
Ryan; Vezo, Abdennour, Mustafi, Siqueira (Gayá, min. 51); Javi Fuego, Danilo, Andre Gomes; Rodrigo (Feghouli, min. 71), Santi Mina y Paco Alcácer (Negredo, m.79).
Celta: 
Sergio; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Marcelo Díaz, Wass;Beauvue (Pape Cheikh, min. 70), Orellana, Nolito (Bongonda, min. 88); Guidetti (Planas, min. 81).
Goles: 
0-1, min. 79: Guidetti; 0-2, min. 84: Hugo Mallo.
Árbitro: 
Undianjo Mallenco (navarro). Amonestó con tarjeta amarilla a Paco Alcácer.
Incidencias: 
Partido correspondiente a la 30ª jornada  de Primera División disputado en el estadio de Mestalla ante unos 38.000 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en memoria del ex portero valencianista Antonio Pérez y por las víctimas del accidente de autobús sucedido ayer en Tarragona.

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