El árbitro italiano Luca Banti cometió varios errores de bulto ayer en Balaídos, aunque en esta ocasión la mayoría de ellos favorecieron al Celta.
En el minuto 38, el colegiado anuló un gol al Panathinaikos por claro fuera de juego de Ibarbo y en el 53 anuló otro tanto a los griegos, obra de Berg, por una supuesta falta. Además, en el 66, Cabral cometió un clamoroso penalti sobre Ibarbo que Luca Banti no vio. En el 79, Guidetti también reclamó una pena máxima en el área griega. n