El director de la planta lamenta que "se demonicen" mecanismos de flexibilidad como los turnos variables y prevé facturar 1.100 millones en los próximos años con los nuevos modelos
La factoría viguesa de PSA Peugeot-Citroën aboga por una mayor reducción de costes para "seguir siendo competitivos" y conseguir nuevos modelos de vehículos para fabricar. "El criterio que se utiliza a la hora de las adjudicaciones es el coste total del producto entregado", indicó ayer el director de la factoría, Ignacio Bueno, que se estrenó en la asamblea del Clúster de Automoción de Galicia (Ceaga) celebrada en las instalaciones de CTAG en Porriño.
Bueno centró buena parte de su discurso en la necesidad de ser una planta flexible y defendió los turnos variables instalados en la factoría de Balaídos como una herramienta que "ayuda a mantener nuestra competitividad". Con todo, lamentó que "se demonicen" este tipo de mecanismos e hizo un llamamiento a los poderes públicos con respecto a una posible modificación de la legislación laboral advirtiendo que establecer cambios en plena recuperación "puede penalizar a la industria". "El incremento de costes derivado de algunas medidas que se están planteando comprometería muy seriamente la competitividad que hemos logrado en los últimos años y nos lastraría de cara al futuro", señaló.
El patrón de la factoría de Balaídos reiteró las buenas perspectivas para 2019 y 2020, que previsiblemente serán los mejores de la historia de la fábrica al superar los 600.000 vehículos anuales y los 1.100 millones de facturación con la llegada del nuevo todocamino de Peugeot (versión renovada del 2008) y una furgoneta para Toyota que será el mismo modelo que las del K9 que se hacen actualmente. Ignacio Bueno destacó que la incorporación de la planta de Opel Zaragoza al grupo coloca al Polo Ibérico de PSA (Vigo-Madrid-Portugal y Zaragoza) con un potencial de fabricación de más de un millón de unidades y supone "una gran oportunidad para la industria de componentes".
Las 125 empresas de automoción agrupadas en Ceaga facturaron el año pasado 8.650 millones de euros, un 0,3% menos. Crearon 1.500 empleos, la mayor cifra en la última década, y el sector roza los 22.000 puestos de trabajo. Un centenar de esas compañías exportó por valor de 1.500 millones de euros en 2018, "que no fue el mejor año de PSA y son cifras magníficas", señaló el presidente del clúster, Juan Lloves (GKN Driveline), que renovó en el cargo. El clúster está catalogado como el segundo en términos de gestión de 1.000 que hay en Europa y el primero en el sector automovilístico.n
