CONDADO/LOURIÑA

Luneda cedió ayer al Santuario da Virxe da Franqueira o 'Coto da Vella'

Jesús González,  Javier Alonso y  Miguel F¡Domínguez, ayer en la firma del protocolo de cesión en el Santuario de A Franqueira
photo_camera Jesús González, Javier Alonso y Miguel F¡Domínguez, ayer en la firma del protocolo de cesión en el Santuario de A Franqueira

El párroco Javier Alonso, el presidente de la Comunidad de Montes y el alcalde de A Cañiza protagonistas de la firma

 Ayer lunes, 8 de diciembre, coincidiendo con la festividad de la Inmaculada Concepción, el párroco y rector de A Franqueira, Javier Alonso y el presidente de la Comunidad de Montes de la parroquia cañicense de Luneda, Jesús González, al teminar la Misa vespertina de las cinco de la tarde y ante la presencia del alcalde de A Cañiza, Miguel Domínguez, firmaron el protocolo de cesión de uso del lugar popularmente conocido como 'O Coto da Vella', en favor del Santuario de A Franqueira.
    Tanto la misa como el acto de la firma revestido de gran solemnidad, fue seguido por los numerosos vecinos y fieles de ambas parroquias, Luneda y Franqueira, que llenaban el templo.
    O Coto da Vella, en territorio de la parroquia de Luneda (450 metros de altura sobre el nivel del mar), es  uno de los lugares que suelen visitar la mayoría de devotos en su peregrinaje a la Franqueira. Y según las crónica ancestrales, es también el lugar donde se origina la tradición del hallazgo de la imagen de piedra y su posterior traslado en un carro de bueyes con los ojos vendados  a la cumbre de A Paradanta hasta la aldea donde se construyó la antigua ermita y el actual santuario donde hoy se venera. 
    Y según recoge la leyenda popular, quien encontró la imagen escondida entre unos peñascos  -atraída por una luz resplandeciente-, fue una anciana lugareña, de ahí el nombre de 'O Coto da vella'. Como recuerdo del hecho milagroso, en 1968 se erigió en el lugar donde se supone que apareció la Virgen (que había permanecido allí escondida para preservarla de la invación sarracena desde el año 738), una cruz y un altar, y se bendijo la réplica en piedra -obra del escultor orenesano Celso Calviño García-, de la imagen original que hoy se venera en el Santuario de Nosa Señora da Franqueira.

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