La investigación considera que el fuego que arrasó la parroquia de Queimadelos, Mondariz, fue intencionado
Los ocho incendios activos desde el inicio de la semana en la provincia, ayer controlados aunque no apagados, han quemado ya más de 1.200 hectáreas. Cuatro están en el área de Vigo: tres en Soutomaior-Arcade, activos desde la tarde, que afectan a Redondela, y otro en Mondariz. Los otros eran los de Cotobade, Pontevedra, Pontesampaio y Caldas. En Caldas, el incendio provocó el corte nocturno de la autopista AP-9. Quedó controlado tras calcinar unas 290 hectáreas.
En el de la parroquia de Arcade, que se aproximaba anoche al núcleo de Xunqueiriñas, trabajan 1 agente, 5 brigadas, 4 motobombas y 1 helicóptero. Por su parte, en San Martiño de Ventosela, donde hay dos fuegos abiertos y otro controlado, permanecen desplazados 2 técnicos, 15 agentes, 32 brigadas, 27 motobombas, 2 palas, 14 helicópteros y 3 aviones, además de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).El primero que se descubrió, el martes, todavía permanecía activo tras afectar a una superficie de unas 200 hectáreas. En su control trabajan un técnico, 11 agentes, 23 brigadas, 20 motobombas, una pala, 14 helicópteros y tres aviones. Además, colaboran efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
Al margen de los dos nuevos fuegos declarados en Soutomaior, sigue activo un incendio en Pontevedra, en la parroquia de Ponte Sampaio, que supera las 20 hectáreas, y ya se dan por controlados los fuegos iniciados en la parroquia de Lérez del mismo municipio, así como los declarados en Cotobade, Mondariz y Caldas de Reis.
También permanece activada la `situación 2` -preventiva- en Tenorio (Cotobade). Comenzó a las 17,20 horas del lunes y afecta una superficie de unas 365 hectáreas. Han sido movilizados hasta la fecha dos técnicos, 18 agentes, 33 brigadas, 18 motobombas, seis palas, 15 helicópteros y tres aviones.
Asimismo, a las 23,35 horas del martes se declaró otro incendio en Lérez, Pontevedra. Las primeras estimaciones sitúan la superficie afectada en más de 20 hectáreas. En Queimadelos (Mondariz), la superficie quemada asciende a unas 200 hectáreas. El incendio también afectó a Meiros y Mouriscados y Cumiar (Ponteareas). Pudo ser estabilizado doce horas más tarde aunque no extinguido en su totalidad por lo que la vigilancia se mantiene activada en toda la zona. Tras una noche de vigilia, los vecinos pudieron regresar a sus casas, que no sufrieron daños gracias a la intensa labor llevada a cabo por los bomberos de Ponteareas y de Vigo que reforzaron el dispositivo (los bomberos del Baixo Miño (Porriño), habían sido derivados al incendio de Cotobade.
Las líneas de fibra óptica de Telefónica en Vilasobroso, ardieron y A Cañiza y O Covelo estuvieron sin servicio de internet. Es la segunda vez que arde toda esta zona de Mondariz, pasto de las llamas en la plaga de incendios forestales que asoló Galicia en 2006. Por la forma en la que se inició el fuego en Queimadelos (dos focos simultáneos), las investigaciones apuntan a que fue provocado. n
