Según datos de Turismo, el 85% de los peregrinos que lo emplean son extranjeros
Visibilizar mejor el camino portugués por la costa. En esta tarea se encuentra actualmente inmerso el Concello de Baiona, que está repintando toda la señalización al respecto con conchas de vieira y flechas amarillas que indican con exactitud a los peregrinos qué dirección deben tomar para llegar a la ciudad santa.
Este camino discurre a través de 9,2 Km por tierras baionesas y cuenta ya con gran afluencia de peregrinos (de principio a fin son 78,21 km). Según datos facilitados por la oficina de turismo, el 85% de estos viajeros son extranjeros. Entre ellos, el principal país emisor es Portugal, pero también sobresale la presencia de alemanes, polacos y estadounidenses. Tampoco falta la presencia más exótica de personas de países tan alejados como India, Malasia, Kirghizistan, Corea, Nueva Zelanda o Canadá.
Esta ruta de peregrinación ya tenía gran importancia en la Edad Media, siendo fundamentalmente utilizada por peregrinos procedentes de las tierras más occidentales de Portugal, entre los cuales se incluían los procedentes de países de ultramar que arribaban a los puertos portugueses para llegar hasta Compostela. Esta ruta, que transcurre desde A Guarda hasta Redondela, atraviesa los municipios de O Rosal, Oia, Baiona, Nigrán, y Vigo hasta que llega a Redondela, donde continúa el mismo trayecto que hacen los peregrinos procedentes del camino portugués que transcurre por el interior. Sin embargo, esta variante costera fue todavía reconocida oficialmente por la Xunta en 2010. Ahora el Concello de Baiona afirma que "tiene un gran compromiso por potenciar esta y otras de la localidad".
Este año los grandes embajadores del camino portugués por la costa han sido precisamente los alumnos del CEIP Belesar, que fueron los únicos gallegos finalistas en un concurso sobre patrimonio de la Red Españoles de Albergues Juveniles. Los alumnos (en algunos casos ataviados con el traje tradicional gallego) realizaron un vídeo caminando por él, destacando los montes de Baredo, calles del casco histórico de Baiona, Santa Cristina, la calzada real, los puentes de Sabarís y el puente románico de A Ramallosa. Finalmente quedaron segundos, pero miles de personas vieron su grabación.n
