Vecinos y empresarios presentaron ayer por registro su petición para intervenir en el pleno del próximo 28 de junio
nnn Una amplia representacion de vecinos y empresarios de comercio y hostelería de la Plaza Mayor y su entorno, presentaban ayer en el Concello de Ponteareas un escrito solicitando intervenir en el próximo pleno del día 28 de junio.
La intención de los que se sienten afectados por las nuevas normas que van a regir en cuestión de seguridad vial y humanización de espacios públicos como la Plaza Mayor, no era otra que exponer su preocupación ante lo que consideran "una imposición" del grupo de gobierno que se ha caracterizado en este tema "por su falta de diálogo" en torno a un proyecto que quieren implantar, no solo en esta zona, sino en la práctica totalidad del casco urbano (empezando por esta plaza y ambas calles y continuando por el entorno de la Plaza de Abastos y el Auditorio y la zona más cercana al consistorio).
Ahora, y para ponerlo a andar, la zona elegida es la propia plaza y las calles Esperanza y Oriente, el tramo final de la rúa San Joaquin con la confluencia con la calle Santa Ana donde ya se han empezado a colocar señales de prohibición de paso de vehículos. Una en concreto, de prohibido el paso, que tal y como está ubicada, impide el acceso a los garajes de los edificios (en la trasera de la propia plaza Mayor).
Así las cosas, quienes ayer representaban a muchas personas afectadas por esta decisión, se personaban en el Concello para hablar con el alcalde, Xosé Represas (BNG), al que reprochan haber priorizado "la imposición" sobre el diálogo. Pero estas personas, que se sintieron "ninguneadas", se toparon con la puerta de alcaldía cerrada a cal y canto, y con la primera teniente de alcalde, María Jesús Garrote (PSOE), en actitud "poco educada", al contrario que los los concejales de Riada do Tea y EU-SON, quienes sí escucharon su argumentación. n