La Xunta descarta el desabastecimiento mientras el alcalde habla de ‘alerta roja’

En concreto, el regidor vigués hacía referencia a Baiona y Nigrán –principales localidades que abastece Zamáns– pero hizo extensiva su preocupación también al caso de Vigo, que depende fundamentalmente de la presa de Eiras, con un volumen de agua embalsada del 43 por ciento.

Por ello, Caballero informó que pedirá “formalmente” a la Xunta que acometa cuanto antes el trasvase desde la confluencia de los ríos Oitavén y Verdugo hacia la canalización de Vigo y avanzó que encargará a los técnicos municipales y de Aqualia que comiencen a elaborar el proyecto de una obra que corresponde hacer al Gobierno gallego.

Por su parte, la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras insistió, como en las últimas semanas, en que “no hay motivo para la alarma”, ya que los embalses de Vigo tienen agua embalsada para abastecer a la ciudad y a los municipios vecinos hasta enero. Así, recordó que la alerta se daría en caso de que hubiera agua para menos de 40 días, y “actualmente se está lejos de esa situación”.

Asimismo, señaló que Augas de Galicia está estudiando “las mejores opciones” para acometer el trasvase de agua entre los ríos Verdugo y Oitavén, y que la Xunta se mantiene “vigilante” por si fueran necesarias medidas para evitar problemas. Finalmente, la Consellería manifestó su “perplejidad” por las exigencias de Caballero, que pide una obra urgente, “cuando tuvo cuatro meses bloqueadas las obras del emisario de O Morrazo”, con un proyecto “aprobado por el propio Concello de Vigo”.

El alcalde vigués incidió en que las previsiones meteorológicas indican que “esta semana tampoco lloverᔠ–el pronóstico dice que hay probabilidades el fin de semana– y advirtió que en dos o tres semanas sin llover podría verse afectada la calidad del agua, al bajar del 30 por ciento.

“No nos vamos a quedar de brazos cruzados mientras estos incapaces absolutos e ineptos dejan a Vigo sin agua”, sentenció Caballero quien acusó a la Xunta de ignorar el problema y limitarse a esperar a que llueva.

Los ecologistas rechazan el trasvase

La Plataforma pola Defensa da Ría de Vigo, al igual que hizo la semana pasada la asociación ecologista Amigos da Terra, manifestó ayer su oposición al trasvase planteado desde la confluencia de los ríos Oitavén y Verdugo hacia la canalización de Vigo para solucionar el problema de sequía de la comarca al considerar que supondría un grave perjuicio ecológico para la zona.

A través de una nota, la Plataforma recuerda que durante la canalización se pierde el 30 por ciento del caudal y propone que se establezcan restricciones entre la ciudadanía para que conozcan el valor del agua y aprovechar los recursos naturales de una manera racional acorde con la situación de escasez, potenciando e incentivando el uso de las aguas pluviales mediante embalsado y las aguas subterráneas.