Triple festejo en Valadares: paralizaron los fuegos del churrasco y el pulpo por riesgo de incendio

La parroquia de Valadares vivió ayer su gran cita estival: el triplete festivo que celebra la Festa do Socio, la Festa do Veciño y la Festa do Polbo. En esta ocasión, el festejo dejó atrás su ubicación en el Parque Forestal Monte dos Pozos para estrenar la carballeira do Pedregal.

La fiesta empezó a las 11:45 horas con la preparación del churrasco y del pulpo en el nuevo espacio. Sin embargo, pasadas las 13:15 horas, se anunció que había que paralizar el fuego del churrasco y el del pulpo ante el riesgo de incendio, aunque aseguraron que habría “churrasco y pulpo para todos”.

“Este año hay polémica con el tema de los incendios. Apagaron todo ahora, pero tuvimos suerte y pudimos coger algo de comer”, comentaba Marcos, un asistente habitual. “Ahora, con la ola de calor, están viendo qué hacer con lo del churrasco. Pero bueno, con esta ola de calor es cierto que se suelen provocar bastantes incendios. Al final lo importante es que estamos disfrutando de la fiesta”, añadía Cristian, primerizo en la fiesta.

A la celebración acudieron el alcalde, Abel Caballero; el concejal del PSOE Pablo Estévez; la concejala del PSOE Nuria Rodríguez; la delegada de la Xunta, Ana Ortiz; la directora de Traballo, Marta Mariño; la vicepresidenta de la Diputación, Luisa Sánchez; la concejala del PP Patricia García; la diputada del BNG Carmela González; y, finalmente, el concejal del BNG Xabier Igrexas.

En su intervención, Caballero mencionó la gran labor de la coral y afirmó que la Banda de Valadares “era la mejor banda de España”. Además, el regidor destacó el valor de los espacios naturales, como la caballeira del Pedregal, y la importancia de protegerlos.

El momento emotivo vino con las palabras en recuerdo de César Acevedo, uno de los fallecidos en el naufragio del pesquero “Argos Georgia” y vecino de Valadares.

Antes del “xantar” se reconoció la labor deportiva de Rafael Comesaña, entrenador del equipo de fútbol en categoría preferente a nivel gallego, y de Andrés Davila, a título póstumo, por su labor como entrenador del equipo de fútbol. Manuel Daponte y Tomás Alonso fueron reconocidos en el ámbito cultural, el primero por su participación en la comunidad desde la fundación Escola de Acordeóns do Centro Veciñal y el segundo por llevar toda su vida vinculada al ámbito musical de Valadares. En “veciñanza”, distinguieron la labor de Eugenia García, por su larga trayectoria de trabajo en las directivas del centro y de las comisiones de fiestas de la parroquia, a Carlos Alonso, como responsable de la secretaría del centro veciñal, y, finalmente, a Javier Touriño, por su implicación en el ámbito vecinal.