Tráfico pone freno a la velocidad con más kilómetros vigilados en Vigo y su área

El exceso de velocidad sigue siendo una de las principales causas de accidentes de tráfico en Vigo y su área y también el motivo más común de sanción, según las estadísticas que maneja la DGT. La tendencia es generalizada en todo el territorio nacional, donde el año pasado este factor estuvo presente en uno de cuatro siniestros mortales.

Ese dato ha llevado a Tráfico a ampliar tramos de carretera vigilados mediante radar. Solo en la provincia, el número de cinemómetros, tanto fijos como móviles y de tramo, se incrementó casi un 20% en cinco años. Los últimos en colocarse se activaron esta misma semana con lo que ya son 55, más de la mitad, 28, en las carreteras de Vigo y su área.

Las incorporaciones en el último año han sido los tres radares nuevos de tramo, dos de ellos en la zona de influencia viguesa, concretamente en la AP-9 en el km 158 a la altura de Peinador y el ‘mega radar’ de la PO-340, entre Gondomar y Tui, que, además de velocidad es capaz de detectar otra serie de infracciones, como adelantamientos indebidos.

Tras un periodo inicial de funcionamiento en advertencia, sin multar, primero comenzó a hacerlo el de la carretera secundaria y desde esta semana el de la autopista que une Vigo con el resto de la Galicia. Se trata del segundo de tramo con el que se controla la AP-9 en Vigo, al sumarse al que ya había entre A Madroa y el túnel de Candeán.

En total casi diez kilómetros en ambos sentidos y puntos estratégicos de la autopista entre Rande y Peinador, donde los conductores no podrán pisar el acelerador. Estos medidores obligan a los vehículos a mantener una velocidad constante, pues son controlados con cámaras de grabación capaz de identificar matrículas al inicio y final del tramo. La activación completa de los sistemas de control se produce en un periodo crítico por la gran afluencia de desplazamientos como es el próximo puente festivo de agosto.