El talento vigués de Kreios Space gana el premio EmprendeXII

El premio EmprendeXII, otorgado por Caixabank, el ministerio de Industria y Turismo e Igape (Instituto Galego de Promoción Económica de la Xunta), recaló en las manos del equipo de trabajo de Kreios Space, una startup de corte aeroespacial que desarrolla un proyecto para que satélites estén presentes a menos de 500 kilómetros de la tierra y captar así información de una forma más precisa. Ubicada en Bouzas y con talento tanto vigués como catalán y alemán, Kreios Space se resace tras quedar finalista en la última edición. En ésta, cumpliendo 18 años el premio, se presentaron 31 negocios gallegos con poco recorrido vital todavía pero ya muchos de ellos asentados en los mercados.

La startup viguesa se impuso a otras cuatro finalistas a nivel autonómico: Diversa Technologies (Santiago), enfocada en la nanotecnología médica; FlowReserve (Santiago), destinada a las operaciones cardiólogas para que sean menos invasivas, la startup de alimentación vegana con sede en Nigrán Vannetta Food y Yowup! (Poio), especialistas en bebidas y helados para animales de compañía. El jurado deliveró que, por un pequeño margen, Kreios Space sería premiada con 6.000 euros. Además, la compañía tendrá acceso a un programa de formación Moonshot Thinking en colaboración con Esade y también viajará a Berlín para completar el acompañamiento internacional en una iniciativa organizada con el ICEX. Kreios Space también tendrá la oportunidad de participar en los Investors Day EmprendeXXI, unas jornadas durante las cuales podrá mantener contacto con el ecosistema inversor.

El acto comenzó con una pequeña presentación por parte de los finalistas. Cada uno disponía de 3 minutos para convencer al nutrido jurado que se daba cita en el Marco. Entre ellos, Adrián Senar, CEO de Kreios Space, analizó la necesidad de encontrar una tecnología viable y sostenible capaz de que los satélites se encuentren más cercanos a la tierra. Eso lo consiguen mediante propulsión eléctrica, anulando la presencia de combustible. Una iniciativa “difícil de desarrollar” donde la empresa se encuentra a la cabeza mundial por delante de otras startups de Estados Unidos o Reino Unido.

Antes del veredicto del jurado, Lara Neira, de Ingal, y Antón Vázquez, cofundador de Alén Space, analizaron las dificultades que supone comenzar un proyecto de gran calibre desde cero y dieron pequeños consejos a los finalistas. “Hay que tener paciencia y centrarse en solucionar un problema creyendo en sí mismo, sin que te invada el síndrome del impostor", apuntó Neira.

Adrián Senar: “En Vigo existe una apuesta por lo aeroespacial muy sólida”

Kreios Space, ganador de la 18 edición del premio EmprendeXII de Caixabank, ¿cómo nace la idea de un proyecto pionero en el espacio y sin nada realizado hasta la fecha?

Nuestro poryecto no viene de una idea que tuviese al despertar. Viene de largo. Es un proyecto europeo entre varias universidades y empresas en el cual se investigaba la posibilidad de hacer satélites más bajos de los que se han hecho nunca. Eso empezó en 2017. Se analizó qué pasaría si los satélites que están a 500 kilómetros se pusieran a 150 o 200 y qué beneficios tendría. Ahí participó mi universidad, la Politécnica de Cataluña, y como trabajo de fin de grado hice todo el análisis de recursos necesarios y el desarrollo de tecnología. Entonces, ahí se vio que había una necesidad para solucionar ese problema. En paralelo, la Universidad de Stuttgart estuvo desarrollando la primera interacción de ese motor, demostrando que era posible hacerlo realidad. Entonces, nos pusimos manos a la obra. Realmente hay un mercado demandando esta solución y por eso la desarrollamos.

La competencia es dura y viene de Reino Unido y Estados Unidos. ¿Qué os diferencia?

Hay diferentes tecnologías de propulsión eléctrica. Normalmente, los satélites están hechos para usar combustible en unas condiciones muy específicas. Sabes cómo funciona. Lo que están haciendo las otras empresas es adaptar los motores para usarlos con aire. Eso comporta muchas dificultades a nivel técnico, porque en órbitas muy bajas es variable. Y es muy corrosivo. Nosotros cogimos un punto de vista totalmente distinto. Desarrollamos una tecnología completamente nueva que se usaba para medicina y acelera el aire. Eso nos ofrece muchas ventajas respecto a otros sistemas de propulsión.

Con sede en Bouzas. ¿Por qué se asentó Kreios Space en Vigo?

Estamos en Bouzas pero esperamos movernos a Porto do Molle, en Nigrán. En Vigo y alrededores existe una apuesta por lo aeroespacial muy sólida. Y no sé hasta qué punto no se conoce. Alén Space tiene más de 90 trabajadores en sus filas, por ejemplo y Stellantis atrae mucha metalurgia, que puede ser adaptada al sector espacial. Entonces, tienes un ecosistema propicio para desarrollar el talento. Y mucha colaboración.