Vuelven los fuegos y las orquestas: “Hay muchas ganas de fiesta”

La pandemia supuso un parón para muchos sectores, sin embargo aquellos más perjudicados fueron los relacionados con el movimiento de grandes masas de gente, entre ellos el sector de la pirotecnia y las orquestas musicales. La cancelación de las fiestas locales y todos los eventos supuso la inactividad absoluta para estos animadores de fiestas, quienes vivieron momentos muy duros.

Argimiro Albores es una de las empresas pirotécnicas ubicada en Nigrán. Dedicados a la fabricación, montaje y disparo de los cohetes llevan funcionando durante tres generaciones, desde 1934. Según aseguraba su dueño y presidente de la Asociación Gallega de Pirotecnia, Argimiro Albores, la cancelación fue total, “lo único que se vendió fue algo de la tienda para uso particular, sin embargo quedó todo anulado, las fiestas se paralizaron y con ello toda su venta” afirmaba. Albores relataba que, aunque durante los dos últimos años han supuesto “un golpe muy duro”, las empresas pirotécnicas llevan decayendo varios años “en 1990 eramos 40 empresas en la asociación en toda Galicia, a día de hoy solo quedamos 14”.

Desde la retirada de las mascarillas las compañías dedicadas a la pirotecnia van poco a poco recuperando su clientela, la vuelta a la normalidad va paso a paso, sin embargo, tal y como dicen los profesionales de este sector, “no es ni similar a lo que era antes de la pandemia” pues, según Albores “las comisiones de fiestas no cuentan con el mismo presupuesto, a muchas casas habría que ir a dar dinero en vez de pedir para las fiestas”.

Aunque las sensaciones entre los animadores de fiestas son muy similares, en cierto modo varía dependiendo del tipo de venta y su magnitud, pues las percepciones de Pirotecnia Bemil, empresa ubicada en Caldas de Reis que se dedica a, en su mayoría, la venta de cohetes y elementos pirotécnicos a particulares, varían un tanto, su dueño, Santiago López, aseguraba que en la venta de estos a nivel particular no se ha notado tanto, sin embargo sí en las tiradas grandes. “Nosotros hacemos algunas tiradas grandes y ahí es verdad que sí se ha notado, sin embargo nos dedicamos más a la venta particular, en ese sentido vamos avanzando, pasar de nada a lo que estamos vendiendo es positivo” aseguraba el gerente, “es verdad que no ni será como era en 2019 sin embargo tenemos buenas previsiones para los próximos meses” concluía.

Además, a la problemática de falta de presupuesto Argimiro Albores añadía que las redes sociales y algunos grupos sociales están siendo muy perjudiciales para este tipo de negocios, “llevamos unos años con los problemas de animales y niños autistas, las tiradas son una, dos o tres veces al año, solo hay que hay que adaptarse a eso, respetar y dejar trabajar, existen estímulos externos como pitidos, ruidos y truenos que también existen, solo queremos que la gente disfrute, ciertos grupos sociales nos lo están poniendo dificil” afirmaba el profesional de la pirotecnia, “tengo clientes con niños autistas que son los propios niños quienes quieren ver los fuegos y hay perros a los que no les molestan este tipo de sonidos, los perros de caza por ejemplo están acostumbrados” continuaba diciendo.

"La gente tiene muchas ganas de fiesta"

Las empresas de pirotecnia no han sido las únicas que sufrieron el parón absoluto consecuencia de la pandemia, las orquestas también y vuelven al ruedo con sensaciones similares, o así lo aseguraba José Antonio Blas, director gerente de la orquesta París de Noia, quien aseguraba que poco a poco van cogiendo rodaje, sin embargo, “dependemos de la situación económica de las comisiones de fiesta, que obviamente no es la misma que antes de la pandemia” afirmaba. “Acumulamos bastantes deudas, nosotros empezamos la temporada en marzo y ya teníamos todo preparado, la inversión estaba hecha y de repente se paralizó todo” contaba el gerente, “por el momento estos primeros meses va todo muy poco a poco; sin embargo, las previsiones para los meses de julio y agosto son algo mejores” terminaba diciendo.

Desde la orquesta Olympus, su gerente José Ferreiro compartía opinión con su compañero de profesión añadiendo que “la gente tiene muchas ganas de fiesta”. La agenda la tienen bastante ocupada desde hace aproximadamente 5 meses, pero aun así la situación es diferente a la que se vivía en 2019, los recursos económicos con los que cuentan las comisiones no se asemejan ni lo más mínimo.