Las playas nudistas ganan espacio en la Ría

Hace ya algunos años, a finales de los setenta, las playas nudistas en Galicia se contaban con una mano: prácticamente se reducían a las históricas de Barra, en Cangas, y Baroña, en la Ría de Muros. También Figueiras en las Cíes, entonces llamada Alemanes, era otro punto donde se podía tomar el sol desnudo. Y poco más. Eso ha cambiado y en la Ría de Vigo ya hay al menos siete calas sin bañadores, tres en el lado Norte y otras cuatro en la orilla sur. Curiosamente, Figueiras ha perdido fuelle como playa natural, aunque así se considera aún en todas las guías. Aunque la legislación no marca qué puntos del litoral tienen que ser nudistas o “textiles”, hay listas más o menos oficiales que sirven de orientación y confirman que se trata de un fenómeno en expansión. Por ejemplo, el portal especializado Playeros.es señala en su edición revisada correspondiente al verano de 2022 que en el municipio de Vigo habría cuatro arenales sin ropa: lel de Figueiras (en las Cíes), Fontaíña (en O Vao) y dos más en Saiáns, A Noiva y Muiños, dos calas espectaculares y también muy concurridas y de difícil acceso por falta de estacionamientos.

Por su parte, el Ministerio de Medio Ambiente publicó en su momento -aunque hasta el momento no ha actualizado- un listado de las playas nudistas “oficiales” de España, un total de 441, y cinco de ellas se encuentran en la Ría de Vigo. Son oficiales atendiendo a ciertos requisitos que plantea el ministerio, siendo el principal que sus respectivos ayuntamientos así lo hayan promovido o aceptado. En la Ría de Vigo aparecen según la lista ministerial cuatro playas en Vigo y otra más en Cangas. Las viguesas son las ya conocidas, Figueiras, Fortiñón y A Noiva, en Saiáns, y Baluarte-Fontañía, en O Vao. En Cangas, además, la más clásica de todas, el arenal de Barra, que también figura entre las zonas costeras nudistas de mayor longitud de España. ¿Entonces estas serían las playas nudistas? En absoluto. En Vigo hay al menos otra más, cada vez más frecuentada, en la costa de Cabo Estai, alcanzando como mínimo cinco puntos del litoral. Pueden parecer muchas, pero son apenas una pequeña parte de las más de 30 calas de todos los tamaños registradas en el municipio entre Teis y Saiáns.

El otro lado

En tanto, en el otro lado de la Ría no aparece un clásico como los Alemanes, en Cangas, al lado de Rodeira, en pleno centro de la villa. Tampoco se incluye otra gran playa nudista, la de Viñó, que hace de puente entre Barra y Nerga, donde se combinan ambas movilidades, pero con preponderancia del baño “al natural”. Más arriba, en la Ría de Pontevedra, también destaca en Sanxenxo el arenal de Bascuas, un espacio consolidado en el ayuntamiento de España con mayor número de banderas azules.

Cabo Estai y A Guía, los puntos de la costa escondidos

En toda Galicia hay al menos 36 puntos concretos para el baño sin ropa, de ellos 22 en las Rías Baixas y el resto en las Altas y el Cantábrico. Destaca la concentración en Ons, donde aparecen cinco. En la Ría de Pontevedra, cuatro; en la de Arousa, solo dos, ambos en O Grove, y en la de Muros-Noia, otros seis. En la Ría de A Coruña, hay seis calas apuntadas por el Ministerio. De las 441 registradas en toda España, el 60 por ciento se concentrarán entre Canarias y Baleares, en tanto que en la Península serían 185 playas nudistas. La mayoría, en lugares aislados. La mayor de todas sería la playa de la Pájara, en Fuerteventura, Canarias, que tiene 13.700 metros de longitud y se encuentra en un Parque Natural.

En Vigo, la más céntrica es Fontaíña, que además de tener bandera azul cuenta con la peculiaridad de ser vecina de O Vao: los bañistas de ambos lados de las rocas coinciden en la orilla. En alza está Cabo Estai, una zona rocosa, y a su lado Praia das Rochas, un acantilado salvaje y nada fácil de localizar, pero muy apreciado por su tranquilidad. Curiosamente, en A Guía hay también una cala minúscula, que desaparece con las mareas vivas, convertida en un punto de nudismo. Llegar hasta la playa del Faro no es tampoco sencillo, pero vale la pena.