Récords de lluvia y viento hunden la mejor estadística de Peinador

En tres días, 12 vuelos anulados, frente a 16 en resto del año, la mayoría por las rachas en el aeropuerto. Vigo recibió 300 litros en una semana, 72 en la jornada del martes

La zona de instalación del ILS, de ayuda al aterrizaje, la mejor arma contra la niebla, pero ineficaz ante los vientos.
La zona de instalación del ILS, de ayuda al aterrizaje, la mejor arma contra la niebla, pero ineficaz ante los vientos.

Peinador había acumulado hasta el pasado 1 de noviembre tan solo ocho desvíos por meteorología adversa (incluyendo niebla y especialmente viento), a los que hay que añadir la repercusión en sus salidas asociadas (otras ocho), lo que suponía apenas un 0,2% del total de operaciones comerciales registradas en el aeropuerto desde el 1 de enero. Una estadística que rozaba la perfección y sobre todo teniendo en cuenta los antecedentes, cuando aterrizar en Vigo era una lotería, hasta que se instaló el nuevo ILS de máximo rango. De hecho, entre esas fechas, hasta el 1 de noviembre, el aeropuerto también recibió tres vuelos de llegada y otros tantos de salida desviados desde Oporto debido al mal tiempo en el aeropuerto luso.

Eso fue hasta la llegada del temporal que azotó la Rías Baixas, que trajo además de lluvias récord, vientos muy intensos que afectaron a la navegación aérea, que incluso alcanzaron los 90 por hora. Son esas rachas y no la niebla, como ocurría en el pasado, las que juega en contra de la terminal aérea viguesa. En concreto, en estos últimos ocho días se han desviado a otros aeropuertos seis vuelos más, con sus respectivas salidas, también anuladas. Las tres últimas fueron durante la tarde del martes, con tres aviones de otras tantas compañías y orígenes, que acabaron, uno en Coruña, otro en Santiago y otro en Oporto. El primero de los vuelos desviados fue el de Air Europa, que llegaba de Madrid a las 17,10 horas. Este aterrizó en el aeropuerto de A Coruña, aeropuerto desde el que salió de nuevo hacia Madrid. Asimismo, el vuelo de Iberia que llegaba de Madrid a las 22 horas también se vio afectado por las "condiciones meteorológicas adversas". Condiciones que obligaron a desviar este vuelo al aeropuerto de Santiago, desde el que este avión zarpo de nuevo hacia la capital española. Ya a última hora del día, el vuelo de Ryanair procedente de Barcelona, y con llegada prevista a las 22,30 horas, se desvió al aeropuerto de Oporto y su salida del vuelo desde el aeropuerto de Peinador fue cancelada.

En cuanto a la lluvia, el temporal ha supuesto un auténtico récord de precipitaciones y en apenas una semana el control de la agencia Meteogalicia en el campus univesitario recogió casi 300 litros, en tanto que el punto de observación del centro superó los 250. La plusmarca del martes resulta incluso más sorprendente, con 72 litros en la sede de la Universidad, sin precedentes recientes para una sola jornada. Aun así, en Galicia hubo municipios todavía más húmedos, como Fornelos, con 75, y A Lama, que superó dicha cifra. El temporal ha sido de tal calibre que en diez meses se recogieron 700 litros y en solo una semana otros 300. Los meteorólogos anunciaban un otoño seco, pero finalmente no ha sido así.

Para los próximos días se prevé que remita la actual situación, con cielos que alternarán nubes y claros, aunque también se esperan chubascos, probablemente no de tanta intensidad.

Agua y muros caídos por efecto del temporal

La Policía Local elevó el número de incidencias por el temporal durante las últimas 24 horas a 30, la mayoría de escasa trascendencia, destacando la clásica inundación de Julian Estévez y la también habitual en la Carretera vieja de Madrid, donde el sistema de alcantarillado estaba obstruido por las hojas.

En la calle Martínez Garrido, concretamente en el túnel de acceso a la estación de autobuses, a las 4,27 horas se localizó otra balsa de agua en el interior del túnel de acceso de Martínez Garrido a la circunvalación Arquitecto Palacios. Los agentes realizaron labores de retirada de las hojas que obstruían el registro del alcantarillado, logrando desaguar la zona y restablecer la circulación.

En cuanto a desprendimientos, a las 14,43 horas del martes se produjo el primer aviso por un muro en la calle Mestre Alfredo González. La unidad desplazada comprobó que se trataba de un pequeño corrimiento de tierra, retirando de la calzada los restos que se habían soltado de un talud.

Situación similar se produjo en Valladares, con un carril de circulación cortado con tierra y piedras debido al derrumbe de un talud en el Camiño da Igrexa.

Contenido patrocinado

stats