La protección de los edificios se amplía en el centro urbano

El PEEC, el Plan Especial de Edificios a Conservar, de 1990, se va a sustituir por el nuevo Plan Especial de Protección del Ensanche Histórico que supondrá un cambio radical: se amplía el ámbito y también será más riguroso en sus planteamientos. Supondrá una mayor protección de la mayoría de edificios situados en el centro urbano, incluyendo Colón, Urzáiz, Policarpo Sanz, García Barbón. Todo el Ensanche estará protegido. Hasta ahora ya lo estaba, pero el PEEC se había quedado obsoleto. Ahora estará actualizado y habrá mayor seguridad jurídica. A cambio, más restricciones.

Entre otras cuestiones, el nuevo Plan del Ensanche Histórico contempla el tratamiento integral de cara a la recuperación de lo que fue la primera expansión de la ciudad, ya en el siglo XX. Eso pasa, según se indica en el PGOM, por la conservación, valoración y mantenimiento de la estructura urbana con eje central Colón-Urzaiz-Gran Vía y sus calles anexas, donde se levantaron algunos de los edificios más importantes y de mayor valor. Se contempla la regulación del tratamiento del acondicionamiento del espacio público y del sistema de espacios libres y su tratamiento y, como objetivo fundamental, la conservación y rehabilitación de los edificios, protegiendo aquellos susceptibles de catalogación. La norma municipal plantea la mejora de las condiciones ambientales y de servicios a la población y una ordenación pormenorizada del suelo urbano, pudiendo definir ámbitos de áreas de repartición para el desarrollo de remodelaciones urbanas.

Por último, el Plan del Ensanche se pone como objetivo abordar el tratamiento de espacio público desde la perspectiva de la movilidad sostenible y de las soluciones que favorezcan los desplazamientos en el modo de emisiones neutras, a pie o en bicicleta, así como actuaciones que supongan la mejora de la calidad ambiental y de las condiciones de accesibilidad al Ensanche. En todo caso, el plan mantiene el uso residencial como global, regulando los complementarios según sea el caso. Es decir, que el Ensanche no puede ser una pieza de museo, sino una zona viva.

Además del Ensanche, el PGOM incluye otros planes de protección similares: el Plan Especial Monte do Castro, del Barrio Histórico de Canadelo, del Barrio de Ribadavia, de A Rola, de Numancia, do Camiño de Rioboo, da Salgueira, de Cordeiro-Rocío, Chouzo, Cordeira, Figueiredo, Espedrigada, dGuixar, Espiñeiro-Teis-Ríos, Balbarda, Paradela, Toural, Vista do Mar-Cantabria, Rosal Florido, Parque de Castrelos, Barreiro y el núcleo histórico de San Paio, Algunas de estas zonas, como Guixar, lo que se opta es por que los propietarios puedan mejorar sus viviendas, sin estar “afectados”.

Huella Pacewicz

El cogollo central de Vigo es territorio de Michel Pacewicz, el arquitecto francés que dejó enorme huella en la ciudad con sus construcciones entre eclecticistas y medievalistas. Entre ellas, la Escuela de Artes y el edificio El Moderno, en la Porta do Sol. En Urzaiz, siete edificios unidos, que han sido rehabilitados, el último de ellos recientemente al eliminar una visera que afeaba el conjunto.