Prisión para el novio de la joven muerta en Vincios por tenencia ilícita de armas

El joven, de 27 años, fue conducido en un vehículo de la Policía Judicial de la Guardia Civil tras permanecer durante toda la jornada en el juzgado vigués. El compañero sentimental de María Isabel Solla Rodríguez, de 24 años, mantiene su inocencia, pero la jueza decidió encarcelarlo de forma preventiva por carecer de documentación legal de la pistola que provocó la muerte de la joven.

Interrogatorio El novio de la víctima llegó al edificio de los juzgados de Vigo a media mañana, pero no prestó declaración hasta bien entrada la tarde. Durante casi hora y media, el joven respondió a las preguntas de la Fiscalía y de la jueza, que finalmente decidió encarcelarlo. Alrededor de las ocho de la tarde era conducido por agentes de la Guardia Civil al centro penitenciario.

La investigación para esclarecer los hechos se mantiene abierta y será determinante tanto el resultado de la autopsia como el de las pruebas de balística. En cualquier caso y hasta el momento, no se han encontrado elementos que apunten a una implicación directa de Borja Rial en la muerte.

La pistola utilizada apareció lejos de la habitación en la que fue hallado el cuerpo sin vida, por lo que se mantienen abiertas otras hipótesis. La muerte se produjo la tarde del pasado lunes en la vivienda que ambos ocupaban en el barrio gondomareño de Brandufe, cuando María Isabel falleció por un disparo en la sien con un arma sin registrar legalmente.

El caso todavía no se califica como violencia de género Borja R.R. asegura que estaba en el exterior de la vivienda, un edificio en construcción apartado del núcleo de casas de Brandufe, cuando escuchó la detonación y, al entrar en el inmueble, ya se encontró a la joven sin vida. Las primeras hipótesis apuntan a un suicidio, pero la Guardia Civil no descarta otras posibilidades y mantiene abierta la investigación. Fuentes judiciales señalaron ayer a la agencia Europa Press que 'con las diligencias practicadas hasta el momento, no se ha calificado como un posible delito de violencia de género'. Tanto la víctima como su compañero son muy conocidos en la zona, puesto que ambos proceden de familias de la zona, y convivían desde hace años en Brandufe. El terreno sobre el que estaban construyendo la casa había sido un regalo de la abuela del joven, mientras que ella había trabajado hasta hace unos meses en una cafetería. El entierro se celebrará la tarde de este jueves en la iglesia de Santiago de Morgadáns (Gondomar), donde se oficiarán los funerales de cuerpo presente y la posterior inhumación en el cementerio parroquial. El cortejo fúnebre partirá alas 16:30 horas desde el tanatorio de Sasbarís.