La Policía blinda el cementerio de Pereiró para la exhumación hoy de Déborah

El cementerio de Pereiró acogerá hoy la exhumación del cadáver de Déborah Fernández, la joven de Alcabre cuyo cadáver apareció en 2002 en una cuneta en O Rosal diez días después de desaparecer cerca de su casa. La Policía ha preparado un dispositivo sin precedentes para garantizar que la extracción se realiza con todas las garantías y con la más absoluta discreción. Con ese objetivo, la unidad de homicidios de la Brigada Central que investiga la causa dirigirá el despliegue en el que podría contarse con efectivos de la Unidad de Intervención Policial.

El Juzgado de Instrucción 2 de Tui autorizó la exhumación de los restos y ordenó a precisamente a los agentes que se ocuparan de dicha seguridad. Los restos serán trasladados hacia el Hospital Nicolás Peña para ser examinados minuciosamente por el forense judicial de Vigo, en colaboración con el antropólogo forense de Verín y el perito contratado por la familia y autor del informe que descarta la muerte súbita.

El principal objetivo será el de recoger posibles muestras de ADN de debajo de las uñas de Déborah, una prueba que no se hizo en su momento y que todavía es posible llevar a cabo a pesar de que han pasado 19 años, pero además se analizarán los huesos por si hubiera algún tipo de fractura que no se halló en su día. La familia confía en que junto con el análisis del disco duro se pueda avanzar en la identificación del autor.