El Sergas sanciona con 2.000 euros diarios a Acciona por deficiencias en el Cunqueiro

La concesionaria Novo Hospital de Vigo, de la que es socio mayoritario Acciona, fue “castigada” el año pasado con un recorte de 713.264 euros en los ingresos previstos por los 12 servicios no clínicos que presta en los hospitales Álvaro Cunqueiro, Meixoeiro y Nicolás Peña.

Esta fue la cantidad que le descontó el Sergas dentro del canon que tenía que percibir por estos servicios no clínicos en las cuentas del año 2018.

Las penalizaciones por la falta de disponibilidad o por la mala calidad de los servicios no clínicos supuso un importe de 1.954 euros diarios que dejó de cobrar la empresa concesionaria. El canon que pagó finalmente el Sergas por estos servicios se cifró en 29 millones de euros en el año 2018.

El cumplimiento del contrato es examinado con lupa por una oficina creada expresamente para el seguimiento de esta concesión desde el primer momento.

Lo sucedido en 2018 fue un salto significativo para la concesionaria porque los descuentos que le aplicó el Sergas en ese ejercicio multiplicaban por cuatro los del año anterior, con otro recorte de 168.607 euros en 2017, y vino motivado por el hecho de que la Administración pasó a calcular los incumplimientos de la empresa utilizando una base diaria y no mensual como venía haciendo hasta la fecha.

Las relaciones entre Acciona y el Sergas han sido un tira y afloja desde el momento en que se firmó el contrato de operación y mantenimiento el pasado día 25 de septiembre de 2015.

Durante ese primer año del contrato el Sergas ya le había aplicado la tijera con un descuento cercano a los 190.000 euros, mientras que en 2016 le recortó otros 400.000 euros por las distintas penalizaciones derivadas de la calidad y disponibilidad de los servicios prestados.

En cuanto a los 713.264 euros que le descontaron en 2018, el servicio que provocó mayores quebraderos de cabeza al Sergas fue con diferencia el de lavandería y lencería, con un recorte de 261.461 euros a la cantidad que debía percibir Acciona. El año anterior le habían penalizado con 44.000 euros menos. La concesionaria ingresó más de 3 millones de euros en 2018 por gestionar este servicio concreto.

Sin embargo, el más caro de todos es la limpieza, que ronda los 9,2 millones de euros al año, y a la que le restaron 168.869 euros en 2018 por diversos incumplimientos.

El tercer servicio con más recortes fue el de restauración, con un tijeretazo de 146.983 euros. El Sergas paga cada año cerca de 5 millones de euros por la restauración. Por las tareas de mantenimiento general de las instalaciones del nuevo hospital sufrió otro recorte de 46.500 euros por sus incumplimientos.

Finalmente, no se libró de los recortes ninguno de los 12 servicios no clínicos.

La concesionaria mantiene múltiples litigios frente al Sergas

La sociedad Novo Hospital de Vigo que lidera Acciona mantiene varios frentes abiertos contra el Sergas en los juzgados, todos ellos por las cantidades que percibe, pero también con el Concello de Vigo por el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles, cerca de un millón de euros anuales que finalmente deberá pagar tras una sentencia dictada por el TSXG, así como por las tasas de entrada de vehículos de varios años. Por otro lado, discutía también con la Agencia Tributaria de Galicia por el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados por la adjudicación del contrato de la concesión, con una cuota de 3,6 millones de euros.

Las cuentas de la concesionaria correspondientes al año 2019 fueron rechazadas en fecha reciente en el Registro Mercantil que puso varias objeciones y aún están sin corregir por parte de la empresa. Sin embargo, tal como se recoge en las cuentas de 2018, la sociedad mantiene discrepancias con la Consellería de Sanidade por cuestiones relacionadas con la ejecución del contrato que dieron lugar a distintos recursos contencioso-administrativos. Uno de los motivos de discusión fue el importe que la Administración debía satisfacer a la concesionaria por poner a disposición del personal una parte del aparcamiento, pero hubo muchos más asuntos que terminaron en manos de los juzgados. Entre la lista de contenciosos presentados hay motivos muy variados: está la dotación del mobiliario del nuevo hospital que el Sergas consideraba incompleto (la empresa interpuso recurso en julio de 2017), las discrepancias sobre el reequilibrio económico-financiero del contrato de concesión que la empresa solicitaba al costar la infraestructura un coste superior al previsto (contencioso iniciado en octubre de 2017), las diferencias sobre ls costes energéticos, la modificación del sistema informático de gestión de incidencias diseñado por ambas partes porque el Sergas quería cambiar los parámetros (contencioso iniciado en enero de 2018), discrepancias sobre el coste de los menús de restauración en 2016 y 2017, el mantenimiento de camas del Meixoeiro y el Nicolás Peña, los precios de los menús de las cafeterías, la compensación por la bajada del precio del aparcamiento del hospital, entre otros.