Las parroquias, un nicho inmobiliario ante la falta de vivienda en el centro

Asociaciones de vecinos, inmobiliarias y promotores constatan el auge de la demanda de casas en las afueras

Casas con el cartel de “se vende” en parroquias del rural de Vigo como Bembrive o Alcabre.
Casas con el cartel de “se vende” en parroquias del rural de Vigo como Bembrive o Alcabre. | Vicente Alonso

Las parroquias rurales de Vigo como Valladares, Beade, Bembrive, Cabral, Matamá, Coruxo, Alcabre o San Miguel de Oia están registrando un aumento de población en los últimos años. Así lo constatan asociaciones vecinales, inmobiliarias y promotores, que relacionan este crecimiento con la falta de oferta inmobiliaria en el centro urbano y con un cambio de hábitos tras la pandemia del covid. El perfil predominante entre los nuevos residentes es el de familias con hijos y personas jubiladas que buscan tranquilidad sin alejarse de la ciudad.

En plataformas digitales como Idealista, el número de viviendas en venta o en alquiler en cada parroquia de Vigo se cuentan por decenas, desde inmuebles en buen estado a precios que pueden superar el medio millón de euros a casas casi abandonadas para su rehabilitación. En estas zonas también es habitual encontrar carteles de “se vende” o “se alquila” en ventanas y entradas.

Desde la Asociación Cultural y Vecinal de Valladares, su presidenta, Ana Pérez Davila, destaca que el incremento poblacional es evidente. Aunque no disponen de datos actualizados del censo, la percepción desde el centro cultural de la parroquia es clara. “Notamos que se hicieron muchas casas nuevas y las que se ponen en venta todas se compran rápido y al precio que sea”, señala. Según explica, la zona ha crecido de forma constante desde la apertura del hospital Álvaro Cunqueiro y especialmente en los últimos dos o tres años. Según el último censo del que disponen en la Asociación, Valladares contaba con cerca de 6.000 vecinos, pero estiman que a día de hoy serán ya unos 7.000.

En el entorno del propio Centro Cultural de Valladares se construyeron al menos seis viviendas nuevas recientemente, y hay más en proyecto. “Desde la pandemia la gente cambió el chip”, indica Pérez Davila, que describe una llegada de nuevos vecinos que se integran sin problemas en la vida social de la parroquia. La actividad cultural, la cercanía a la ciudad y a la costa, y un entorno más tranquilo figuran entre los motivos señalados por los nuevos vecinos para tomar esta decisión.

Una situación similar se observa en San Miguel de Oia. Ángel Goberna, presidente de la asociación vecinal, subraya que “las parroquias van creciendo” y que el ritmo podría acelerarse los próximos años. Goberna considera que la escasa disponibilidad de suelo en el centro de Vigo empuja a muchas familias a trasladarse a la periferia, donde es posible construir viviendas unifamiliares. En esta parroquia también se notó un aumento de participación vecinal de la mano de este crecimiento de población. En lo que va de 2025, al menos una treintena de personas se han sumado a la asociación, sin ser residentes tradicionales del lugar. La zona, que combina playa y monte, atrae sobre todo a familias consolidadas con hijos, según Goberna. También desde otras parroquias como Beade o barrios como Teis se ha detectado esta tendencia.

Los promotores ven una oportunidad con el PGOM

Las inmobiliarias locales lo confirman. Desde Remax Balaídos explican que el centro está saturado y que muchas familias optan por una vivienda en el entorno rural de la ciudad. En estas zonas hay movimiento tanto en compraventa como en alquiler, con perfiles que combinan la cercanía a Vigo con una vida más tranquila. Los promotores inmobiliarios observan el mismo fenómeno, aunque precisan que la mayor parte de la construcción realizada hasta ahora ha sido impulsada por propietarios particulares. Javier Garrido, presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Vigo y la provincia (Aproin), afirma que sus empresas solo entran cuando hay suelo disponible para desarrollar promociones de al menos una docena de chalés. “Estas son zonas de autoconstrucción, casas aisladas”, explica. Sin embargo, se muestran a la espera de que el nuevo Plan General abra nuevas oportunidades, especialmente en el crecimiento perimetral de la ciudad.

Contenido patrocinado

stats