Nueva vida para el faro de Cíes
Al próximo cambio de la luminaria por otra más moderna se unirá la musealización del espacio anexo
El faro de las Cíes fue abierto en 1853 y modernizado en varias ocasiones. La próxima, inminente, tras la decisión de la Autoridad Portuaria (APV) de realizar una potente inversión en el cambio de la luminaria y la cúpula, ya que la actual se había quedado obsoleta y presenta ciertos problemas por corrosión ante la proximidad del mar. La operación está pendiente de adjudicación y supondrá una inversión en torno a los 800.000 euros. Exigirá el uso de un helicóptero durante varias horas y se completará en unos cuatro días, ya en 2026.
También se ha incluido en la reforma del espacio la reutilizacion del edificio anexo, que se convertirá en una especie de museo de los faros y de la propia isla. El objetivo de esta última actuación es llegar a convertir la edificación en la primera exposición de este tipo en España. La colaboración entre la Xunta y el puerto vigués será clave para poder abrirlo al público, ya que sería el personal del Parque Nacional Islas Atlánticas -adscrito a la Consellería de Medio Ambiente- la que asumiría la gestión de las visitas. De hecho, la solución que propone el departamento autonómico para garantizar que se pueda visitar de forma práctica y eficiente es implantar un sistema electrónico de control de acceso mediante código QR y con reserva previa que permitirá a las personas interesadas entrar en el edificio y disfrutar del espacio libremente.
Lo que se descarta una vez más es cualquier uso hostelero del entorno del faro, ya como hotel o como bar, como sí se hizo en Silleiro, también de la APV. Que esté en un Parque Nacional lo impide, incluso asumiendo el traslado a diario de los residuos producidos. Así lo señaló el presidente de la APV, Carlos Botana, en el propio faro, adonde acudió acompañado de la conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, el director del Parque Nacional Islas Atlánticas, José Antonio Fernández Bouzas, y la delegada de la Xunta, Ana Ortiz, entre otros. Para ello hubo que recorrer los cerca de dos kilómetros en pendiente hasta la cima a través del camino, propiedad del Puerto de Vigo, como también el muelle de Carracido y la propia instalación lumínica. Otra actuación destacada por Botana fue la instalación de baterías fotovoltaicas para alimentar la isla, con el objetivo de llegar al 100 por cien, incluido el propio camping.
Unos 280.000 visitantes en las Cíes
La conselleira Ángeles Vázquez destacó por su parte los 3,5 millones que invierte su departamento en el Parque y celebró la iniciativa de la Autoridad Portuaria de impulsar la recuperación del faro de Cíes y del edificio anexo, ya que se mostró convencida de que ofrecer a los visitantes a posibilidad de explorar esta construcción se convertirá en un nuevo atractivo para acercarse al archipiélago. Con respecto al balance de la temporada estival, el Parque Nacional, que recibió más de 434.000 visitas en el período comprendido entre 15 de mayo y el 15 de septiembre. Cíes concentró casi el 65% de los visitantes que se contabilizaron en el conjunto de este espacio protegido durante los últimos cuatro meses. En concreto, 281.275 personas visitaron las Cíes en este período, un dato similar a la afluencia media inscrita en los últimos años por estas fechas, que siempre ronda los 300.000 visitantes. Hasta final de año seguirá abierto el Parque, aunque con 450 personas por día como máximo, así que con toda probabilidad la cifra final estará cerca de los 290.000 o incluso más. Cayó algo sobre los dos años anteriores debido al cierre de la temporada alta de Semana Santa por los temporales, que hicieron inviable mantener las instalaciones, perdiéndose unos 15.000 visitantes. Pero en general se trata de cifras estabilizadas a tenor de los aforos existentes. Fernández Bouzas señaló que la realidad de Cíes y el Parque Nacional está ya muy asentada y los números no van a variar en lo esencial gracias al control sobre visitas. Como curiosidad, ayer hubo lleno en las Cíes, con las 450 personas autorizadas ocupando el aforo de la temporada baja. Incluso funcionaban los servicios de restauración del camping y la playa de Rodas, no así otros bares.
Contenido patrocinado
También te puede interesar