Episodios vigueses
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Casi sin espacio para caminar entre los casi 200 puestos de atracciones en la avenida Castelao, ayer volvió a vivirse una jornada multitudinaria en las fiestas de la Consolación de Coia. La afluencia de público se dejó sentir también en los establecimientos del entorno, que registraron llenos continuos en sus terrazas.
El segundo de los seis días de celebración acogió la actuación de Charanga Vai de Baile y Unión Musical de Valladares, que amenizó la mañana de los vecinos. Por la tarde, la actividad se centró en las atracciones y a partir de las 21.30 horas comenzó la verbena que contó con dos orquestas, Ritmo Joven y Alkar.
El momento más esperado de la noche como cada año, la tirada de fuegos artificiales desde la rotonda del barco. En esta edición aún fue más potente, con 100 kilos más de pólvora.
Hoy le toca el turno a la parte religiosa de la celebración, con la misa y la procesión de la Virgen de la Consolación. El toque de campanas se hará de forma manual, en homenaje a su declaración como Patrimonio Inmaterial y el encargado será un vecino del barrio, Mateo Vázquez, el campanero más joven de Galicia. El final de fiesta aún reserva actuaciones como el Combo Dominicano, Finisterre o la Panorama, el martes.
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