Más de 24.000 campistas en Cíes desde junio, cifras espectaculares
Fin del verano para el Parque Nacional
El recinto echó el cierre tras la mejor campaña de su historia. “La mayoría repite año tras año", señala el gerente
En el cámping de Cíes, actividad en marcha para desmantelar las instalaciones, donde la mayor parte del espacio lo ocupan tiendas permanentes que incluyen una litera, con capacidad en algunos casos para dos personas y otras para cuatro, pensadas para familias con niños. En total, 150 que suponen unas 400 personas. El resto, un espacio para el campismo tradicional de quienes traen su propio equipamiento. Hay espacio para 600 personas, pero la decisión es no tener más de 500 a la vez para que haya mejor servicio, explicaba Noe Pérez, que en estos días está al frente de las tareas de clausura del cámping.
Las cosas han ido muy bien este año, gracias a que Cíes es lo que es y a que buena parte de los campistas son ya habituales, que vienen uno y otro verano. “Lo normal es que la gente pase un par de noches la primera vez que vienen, en cambio, los que son habituales están una semana o más tiempo”, explica. Con la temporada finalizada -abren de mayo a septiembre y Semana Santa- durante este 2024 pasaron 24.000 personas, una cifra espectacular. “En marzo abrimos las reservas y prácticamente en unos días completamos todas las plazas, incluso en esta quincena de septiembre estuvimos a tope”, asegura Noe.
Por su parte, Óscar Costas, gerente del cámping de Cíes, apunta que el tope alcanzado resulta muy difícil de superar aunque, según sus cuentas, en este 2024 sumaron unos 200 campistas más, así que sería el récord absoluto. El recinto está catalogado de segunda categoría aunque dentro de unos días cambiará la normativa y se medirá por estrellas. Lo más probable es que se quede con dos: porque para subir tendría que contar con piscinas y otros servicios “que evidentemente ni tenemos hoy ni nunca, esto es para otro tipo de cliente”, advierte Costas.
En agosto de 2023 se produjo un incidente cuando un eucalipto “perdió” una de sus ramas en la zona de acampada, con cuatro heridos. Fue algo insólito, ya que el árbol se encontraba en perfectas condiciones. Según pudo constatar la investigación, se debió a un fenómeno propio de esta especie, que en condiciones de sequedad se libra de partes de su “cuerpo”. La decisión fue eliminar los eucaliptos que había y ya no queda ninguno en pie, como ha pasado en otras zonas de Cíes, donde el Parque Nacional lleva en marcha una campaña de sustitución del paisaje, talando eucaliptos y acacias y plantando en su lugar especies más propias de Galicia. Proceso que se alargará durante años hasta cambiar por completo la imagen de las islas.
Según destaca Noe, Semana Santa fue un auténtico desastre con las fuertes lluvias y mar de fondo que obligaron a cerrar antes de tiempo. “No se podía estar aquí, así que no quedó más remedio”. En mayo y junio la ocupación fue menor, como suele ser habitual, y a partir del inicio de las vacaciones escolares, el cámping se llenó a diario, desde julio a septiembre. Pero desde el pasado lunes, en temporada baja, solo queda abierto el restaurante, como autoservicio, y así seguirá durante estos días de otoño en que todavía hay viajes y 400 personas diarias. El resto de la instalación quedará cerrada hasta la próxima Semana Santa. Estos días incluso se dio la circunstancia de que las mareas vivas obligaron a cortar el acceso por el dique, dividiendo Cíes en tres. Y una curiosidad, han tenido invitados muy especiales al comienzo y al final de la temporada. “Comenzamos con Masterchef, que pasaron un día grabando aquí en mayo, y acabamos estos días de septiembre con “Romería”, la película que dirige Carla Simón, que están rodando ahora en las Cíes”, destaca Noe.
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