Manos Unidas recauda fondos para indígenas pobres de Guatemala

Será a las siete y media de la tarde en la parroquia del Corazón de María. La navarra Ana Guadalupe Aguado, que trabaja como psicóloga en aquel país desde hace 24 años, también dará charlas en colegios como Escuelas Nieto, el instituto Álvaro Cunqueiro y el colegio Sagrado Corazón de Jesús. Además, el domingo 11 de febrero se celebra en todas las parroquias una colecta en favor de esta entidad. La campaña de Manos Unidas, que se celebra este año bajo el lema `Comparte lo que importa`, quiere dar a conocer la situación de las 815 millones de personas que pasan hambre en el mundo. La ONG finaliza el "Trienio de Lucha conta el Hambre", reclamando un mayor acceso a los alimentos, una producción más sostenible y propuestas contra la pérdida y desperdicio de alimentos. Unos 30 misioneros y expertos en desarrollo y lucha contra la pobreza recorrerán estos días más 53 ciudades españolas para compartir su experiencia en algunos de los países más pobres del planeta. En Vigo la cita es con Guatemala.

Aguado trabaja con el Movimiento de Trabajadores Campesinos, ligado a la pastoral social de la Iglesia católica. El objetivo es que las familias campesinas indígenas que trabajan en los grandes cafetales se formen en derechos humanos, puesto que no cobran el salario mínimo (4 dólares al día para una familia de seis o siete miembros) y no tienen derecho a la educación y a la sanidad. Una segunda línea, que es en la que ayuda Manos Unidas, es que estas familias, una vez formadas, se organicen para buscar alternativas, tengan vivienda o un pedazo de tierra para sembrar o tener animales. Una tercera línea es social y cultural. "El cafetal es un sistema deshumanizado, en el que el Estado no entra para promover servicios y en el que dependen del patrón. Caen en una servidumbre profunda para cubrir las necesidades básicas y rompe la posibilidad de desarrollar su pensamiento".