El Liste abre sus puertas al arte de los internos de Teixeiro

Descubrir el talento oculto que hay detrás de los muros. Ese es el objetivo que se marcaron desde el Museo Liste de Vigo al visitar el centro penitenciario de Teixeiro y conocer los trabajos de los internos en el ámbito creativo. “Tienen un nivel artístico muy alto y es una buena forma para reinsertarse en la sociedad de forma útil”, afirma Victoria Vázquez, directora del centro etnográfico.

Después de conocer los talleres y las actividades que realizan durante el cumplimiento de sus penas, Vázquez, junto a Isabel Pousada, responsable de didáctica en el Liste, les abrieron las puertas del museo. “Vamos a colaborar con el material en los programas que ejecutamos, creemos que puede ser un ejemplo para otras empresas a que se animen a hacerles encargos, es una manera de contribuir a su reinserción”.

Además de los artículos de cuero, vidrio, madera o pintura, en Teixeiro realizan trabajos de papiroflexia dándole un uso a los desechos de la fábrica de papel que también hay en las instalaciones. Estas figuras o los juguetes tallados algunos de los elementos que pueden encontrar cabida en las actividades del Liste.

La visita al centro penitenciario, originada por una primera colaboración en el tejido sororal promovido desde el museo vigués, también inspiró el inicio de una investigación etnográfica: “Queremos estudiar la inmaterialidad que rodea a unas personas en un momento concreto de su vida, como desde el arte intentan crearse un futuro profesional y reinsertarse en la sociedad, luchando con el estigma social que supone pasar por la cárcel”.

En su análisis, destacan el papel jugado por los funcionarios de prisiones, potenciando los talentos de cada interno, pasando por las artes plásticas, el teatro o incluso el mantenimiento de una huerta.

Pero en especial, el objeto de esta iniativa es dar a conocer piezas como los murales pintados en las paredes del centro penitenciario, inspirados en el Camino de Santiago, firmados por Paulo Colombia y Farley B. X.

El trabajo comenzó en junio con las mujeres del módulo mixto de Teixeiro y la intención es extender la colaboración en los próximos meses con el resto de los centros penitenciarios que funcionan en Galicia.

“Es muy interesante comprobar cómo la creatividad y las actividades artísticas pueden servir como una herremienta terapeutica contra problemas como las drogas o la marginalidad”.