Lista de espera en el curso de guías del parque Islas Atlánticas

Un total de 85 personas se sumaron a las cuartas jornadas formativas para guías e informadores turísticos que organizó de forma gratuita el parque nacional de las Islas Atlánticas de Galicia.

Uno de los indicadores del éxito de estas jornadas es su elevada lista de espera, puesto que se quedaron fuera 210 personas.

Más de la mitad de los participantes eran miembros del sector turístico, mientras que el resto eran biólogos, personas que trabajan en las compañías navieras, en hoteles o en agencias de viajes. Todos ellos recibieron un curso intensivo el viernes pasado en el edificio administrativo de la Xunta, en el que distintos expertos les transmitieron la necesidad de conservar y proteger este espacio natural, sus valores naturales, patrimoniales e históricos, la forma de utilizarlo los visitantes, el funcionamiento del parque, el papel de los informadores turísticos, entre otras cuestiones. La jornada, que coordinó el director-conservador del parque, José Antonio Fernández Bouzas, se completó el sábado con una visita al archipiélago de las Islas Cíes.

Por otra parte, hasta el próximo viernes está abierto el plazo para inscribirse en un curso de guías del parque, que tendrá lugar entre los días 20 y 24 de abril y para el que se ofrecen 30 plazas. Es también otro curso que organiza el Ministerio de Medio Ambiente a través del parque nacional y que permitirá actualizar los conocimientos de los profesionales del sector.

Investigan a los cetáceos

El parque nacional de las Islas Atlánticas y la Coordinadora para el Estudio de los Mamíferos Marinos (Cemma) llevarán a cabo este año un sistema de monitorización de cetáceos. Para ello investigaron distintos sistemas de detección pasivos acústicos con la tecnología existente y también aplicando metodologías propias. Según los responsables del parque, estos métodos complementan a los clásicos de seguimiento de cetáceos mediante las campañas marítimas y la red de avistamientos costera. Se trata de colocar un detector de cetáceos, que es un hidrófono que graba señales de corta duración y que sólo necesita estar colgado de un artefacto flotante. Los expertos explican que actualmente se desconoce el impacto del ruido marino en las habilidades de los cetáceos, que viven en un mundo relativamente silencioso, pero que las colisiones entre grandes cetáceos y grandes buques de transporte hacen pensar en que podrían tener mermada su capacidad auditiva. Con el sistema de escuchas que se va a utilizar se abren nuevas vías de investigación para conocer mejor el comportamiento de las especies.