Los lectores, de fiesta en Vigo

Desde ficción hasta novelas históricas o suspense, los vigueses eligieron todo tipo de títulos este Día del Libro

Como cada 23 de abril ayer se conmemoró el Día del Libro, una importante fecha para los lectores elegida por la Unesco por la coincidente muerte de los literatos Miguel de Cervantes, William Shakespeare y Garcilaso de la Vega.

Esta señalada fecha para los amantes de las letras tiene el objetivo de fomentar la industria editorial, la protección de la propiedad intelectual por medio de los derechos de autor y sobre todo rendir un homenaje a todos los libros y autores así como alentar a todos los lectores mayores y jóvenes a que se aficionen a este placer.

A pesar de que estos dos últimos años los vigueses no se han olvidado de este día, este año se ha vuelto a celebrar esta jornada con normalidad y las calles de Vigo volvieron a verse envueltas de libros y cultura, ya que se desarrollaron diversas actividades y sobre todo se promovió la lectura. Gran parte de los lectores vigueses como Estela Collazo, decidieron celebrar esta jornada “haciendo una ruta por sus librerías cercanas y comprando libros”.

Algunas de las librerías más céntricas de la ciudad quisieron fomentar la venta de libros ofreciendo promociones e incluso regalando rosas, una práctica común durante este día que hace referencia a San Jorge, quien acabó con la vida del dragón y en el lugar donde se desparramó la sangre creció un rosal.

Xurxo Carreño, uno de los libreros de ‘Librouro’ afirmaba que “se trata de un día muy especial para las librerías, puesto que siempre es una fiesta alrededor del libro y para los lectores es una buena oportunidad para comprar, ya que pueden hacerlo con un pequeño descuento", algo que solo puede hacerse durante este día y en la feria del libro que se celebrará durante los meses próximos.

Títulos como “El libro negro de las horas” escrito por Eva Sáenz de Urturi, “Roma soy yo” de Santiago Posteguillo o “Violeta” de Isabel Allende, fueron algunos de los más sonados, aunque los vigueses destacaron por su diversidad en gustos, ya que tal y como indicaba Alma Fernández, librera en La Casa del Libro “se trata de una elección muy personal”.