El ‘Karar’ se hace esperar

Este mes de julio se cumplen cinco meses desde que el ‘macrojuicio’ por el alijo de 3,8 toneladas de cocaína intervenidas en el buque ‘Karar’ quedara visto para sentencia. La Audiencia todavía está en plazo para emitir un fallo de tal complejidad, atendiendo a causas similares como la del ‘Titán III", que tardó siete meses en ver la luz, o la de la mayor trama de blanqueo de capitales atribuida al ’Culebra' que hace una década obligó a los magistrados a emplearse a fondo durante ocho meses.

Lo ocurrido en el caso del ‘Karar’, que fue abordado en plena pandemia, añade mayor dificultad para agilizar una decisión judicial: los múltiples incidentes que se registraron durante los diez meses en los que se prolongó la vista oral, las suspensiones constantes y las decenas de cuestiones planteadas por las defensas de los 28 acusados.

La Audiencia, además, se enfrenta a la situación que padecen desde hace casi año y medio la mitad de los acusados, los tripulantes de Bangladesh y Nepal, en tierra de nadie tras haber cumplido la máxima pena por ley en prisión provisional, cuatro años.

La Fiscalía modificó sus conclusiones de petición de pena para los 14 marineros extranjeros. De los 13 años de prisión solicitados inicialmente, rebajó a siete años y medio y las defensas solicitaron que se dejara esa condena en seis años y un día por dilaciones indebidas, lo que supondría solo dos años (al haber cumplido ya cuatro) que pidieron se les conmutara por la expulsión a su país, algo que todos ellos esperan desde que les pusieron en libertad, pero sin posibilidad de trabajar al estar irregulares y con enormes dificultades para mantenerse a flote durante todo este tiempo. La esperanza es que, tal y como incidieron los abogados, se atienda también a la petición de que en su caso la sentencia sea firme, ya que de otro modo el proceso va camino de convertirse en uno de los más largos juzgados en Vigo. Los recursos al fallo de la Audiencia están prácticamente garantizados, si no es por las defensas, en caso de condena, será por la Fiscalía en caso de absolución lo que dilatará aún más la sentencia firme ya que hay posibilidad de apelar al TSXG y al Supremo.