Jason Derulo, una estrella en Castrelos

Jason Derulo tuvo tirón en Vigo. Ayer cerca 25.000 espectadores se dieron cita en Castrelos para disfrutar de la actuación con mayor caché de la temporada. Su salida fue triunfal, entre ovaciones. Diez minutos antes, el dj Movi3 caldeó el ambiente con éxitos bailables.

Derulo logró una auténtica fiesta cuando interpretó como regalo final sus grandes éxitos, “Want to want me” y “Talk dirty”. Comenzó con los temas más recientes de su último disco “No King”: “Swalla”, “Acapulco” o “Take you dancing”, los combinó con clásicos de su repertorio: “Ridin’ Solo”, “In My Head” o “Trumpets”. No había llegado a la mitad del concierto cuando sacó la artillería pesada e interpretó “Whatcha Say”, tema con el que logró el estrellato en 2009 y que le sigue acompañando a donde actúe.

Su puesta en escena, cuidada y coreografiada hasta el último detalle, trajo la atmósfera de las grandes producciones al auditorio al aire libre con cambios de luces y efectos visuales. Desde la vestimenta hasta sus bailarines impusieron glamour sobre las tablas. El artista de Miami ofreció un show espectacular que no decepcionó a nadie y que dejó ganas de más. El atrezzo, con dos atlantes de cartón piedra, sorprendieron.

Con su propuesta entre el pop, el R&B y la música dance hizo bailar al respetable casi desde el minuto uno. La gente estaba receptiva, tenía ganas de pasarlo bien y se notó. Cantaron, ovacionaron y se movieron al ritmo de unas canciones pegadizas. Derulo habló mucho, pero solo en inglés. También buscó las distancias cortas, desatando la locura entre los fans.

El alcalde, llegado directamente de la procesión del Cristo da Victoria, no faltó a su cita con la audiencia de Castrelos. Contagiado por el ambiente se quitó la chaqueta y la tiró al suelo. “Este es el mejor artista del mundo para el mejor público del mundo”, aseguró, siguiendo la tónica habitual de sus intervenciones en el parque, alternando castellano y su peculiar inglés. “Lo estábamos esperando”, dijo.