Integración laboral en Vigo para ofrecer "bienestar social"

Diferentes empresas de la ciudad se suman a la integración laboral para ofrecer alternativas vitales a trabajadores con problemas de salud mental. Un colectivo que sufre una tasa de desempleo del 83%, con necesidades especiales para encontrar un hueco y poder desarrrollar un trabajo con garantías. Los premios Empréganos, entregados el pasado miércoles por Saúde Mental Feafes Galicia, vivió su primera edición con las viguesas Acciona Facility Services, Orbe, Freshcut e Inserta, de la Fundación ONCE, galardonadas por su compromiso e implicación con las personas cuyas limitaciones cierran muchas puertas laborales.

Uno de los premiados por su labor, el gerente de Freshcut Eusebio Méndez, resaltó la importancia de ofrecer una adaptabilidad laboral a sus trabajadores que sufren una discapacidad, que ya son más del 70% de su plantilla: “Generamos un microclima donde queremos que se sientan a gusto, que la integración sea sencilla”. La empresa de elaboración de purés a base de frutas y verduras lleva varios años apostando por el trabajo en equipo y por “situar a la persona en el puesto adecuado, porque ellos también cuentan con sus cualidades. Si detectamos que, por presión o cualquier otra causa, un trabajador no puede desarrollar bien su trabajo, intentamos encontrar otro sector donde se sienta más a gusto”. Eusebio aseguró que lo primordial es “colocar a la persona donde tenga más cualidades”, por ello, “apenas nadie ha abandonado la empresa salvo por fuerza mayor o por necesidades de la producción”. Freshcut cuenta actualmente con más de 40 trabajadores en todos sus sectores.

Su apuesta por integrar a trabajadores con problemas mentales en prácticamente la totalidad de los sectores (administración, almacén y producción) es “algo esencial para ellos, porque les ofreces bienestar social, socializar con otros compañeros y una compensación económica”, evitando su aislamiento social y “empiezan a ver la vida de otra forma, más felices”.

Beatriz Vázquez, trabajadora de la empresa Freshcut y con una deficiencia psíquica, es ayudante de cocina y responsable de la máquina de purés, aunque también hecha una mano en la limpieza y en el troceo de frutas: “Entré hace años con unas prácticas de dos meses y al finalizar me llamaron hasta el día de hoy”. Reconoce que, a pesar de sufrir un problema mental, “no me afecta para nada en el trabajo, porque Freshcut, al ser un centro especial de empleo, aprendemos de todos los trabajadores, que es lo que más me gusta”.

Beatriz aseguró que el trabajo también puede ser una buena terapia ante su enfermedad a base de “aprender cada día a encontrar las respuestas que no consigo obtener fuera del trabajo", con un agradecimiento especial a todos sus compañeros, actuales y anteriores, a “aprender y compartir conocimientos con ellos. Estoy muy contenta de estar en la empresa”.

Aunque a veces, a Beatriz el trabajo se le haga duro, sus ocho años en la empresa le sirven para poder mantener un orden vital: “El trabajo es muy bueno, sólo que hay veces que la velocidad con la que se trabaja en picos de mucha producción me impide poder percibir la calidad del producto que realizamos”.