Los guías turísticos de Vigo revelaron los “secretos” de la ciudad

Vigo es una ciudad con un pasado lleno de “secretos”, muchos de ellos desconocidos para gran parte de sus vecinos. La Asociación Profesional de Guías de Turismo de Galicia (Apit) celebró ayer su día internacional con dos visitas guiadas a dos enclaves de la ciudad: una en el Pazo Quiñones de León, en Castrelos, y otra en el centro histórico y el ensanche. 

Dado que las rutas se realizaron durante un día laborable, en ellas participaron vecinos de Vigo. Sin embargo, María Chamadoira, guía turística en la ruta del Pazo de Castrelos, asegura que hay dos perfiles en el público. Por una parte, están los vigueses y el público gallego, que busca conocer la historia de la ciudad, pero, por otra parte, hay una gran afluencia de espectadores ingleses, americanos, algunos franceses y, cada vez más, asiáticos.

La visita al Pazo Quiñones de León empezó pasadas las 11:30 horas. Ahí, los ocho asistentes pudieron conocer como la historia del inmueble está vinculada con el desarrollo de la ciudad de Vigo y sus personajes más ilustres, como la familia Valladares, José Elduayen Gorriti, García Barbón o el matrimonio de Policarpo Sanz e Irene de Ceballos.

Otro de los puntos de esta ruta, ideada para conmemorar el centenario de la donación y ratificación del pazo para la creación del museo municipal, fue la colección de arte. Los asistentes pudieron conocer en primera estancia el conocido como “El legado de Policarpo Sanz”, una de más de un centenar de cuadros que van desde el siglo XV hasta el siglo XIX procedentes de la escuela francesa, italiana, alemana, española, y holandesa.

Finalmente, la visita al Pazo Quiñones de León finalizó en la sala de arqueología, donde los asistentes conocieron algunos los restos prehistóricos, celtas y romanos hallados en Vigo y sus cercanías.

“Me ha gustado mucho la visita porque hacía muchos años que no venía y no me acordaba de todo lo que había aquí. La verdad es que está muy bien conservado y merece la pena venir”, comenta Virginia, una de las asistentes de la ruta, quien aseguró que du parte favorita fue la sala del comedor central.

Marga, otra de las participantes, coincide con su compañera en la visita. “Con estas actividades me doy cuenta de la historia que tiene Vigo, que es muy interesante, y que yo no conocía. Todos teníamos que venir porque conocer cosas de Vigo que igual pasan más desapercibidas y recomiendo mucho la ruta”, explica esta viguesa.

Esta actividad, organizada por Apit Vigo, se realizó bajo el lema “Más que un guía, un compromiso”, con el que la asociación, presente en la ciudad desde hace 35 años, pretende destacar el trabajo y profesión como agentes de cambio real promoviendo el turismo responsable, sostenible e inclusivo.

Sobre el trabajo en la ciudad, María relata que lleva ejerciendo en la ciudad desde el año 1999 y que es un oficio en la que hay que ser versátil. “Es una profesión estacional. La temporada empieza en marzo y finaliza en octubre. Luego, en verano, depende de cada uno. Hay quienes van a museos o a oficinas de turismo. En otoño, también hay bastante ocupación, especialmente desde finales de octubre hasta principios de noviembre aunque, ahora, también se trabaja en diciembre con las luces de Navidad”, detalla la guía.