Gangas en cerámica y ropa interior como remedio a la crisis

La Feria de Valença congrega multitud de visitantes cada miércoles para buscar las mejores gangas en ropa, cerámica o menaje del hogar. Renovar el armario o la cocina puede llegar a ser costoso, y una solución a la crisis y a la inflación es visitar mercadillos como el que ofrece la ciudad portuguesa. A tan solo media hora de Vigo, las tiendas se extienden por todo lo largo de una explanada, donde cientos de personas lo visitan a la caza de las mejores ofertas.

A lo largo de sus más de 100 puestos de ventas, predominan la ropa interior masculina y femenina, los utensilios de cocina y hasta los clásicos y decorativos gallos de Barcelos en diferentes tamaños y las toallas, elemento indispensable para la cesta de la compra al acudir al mercado portugués. Además, varios puestos de camisas y pantalones vaqueros a precios económicos e, incluso, una caravana musical para comprar Cds o casettes de grupos de antaño. Para renovar el jardín también se venden macetas o elementos de decoración, como enanos, y sin faltar las camisetas deportivas o gorras de equipos de fútbol.

Los visitantes, en especial los que acuden por primera vez, se sorprenden ante la magnitud de la feria, la cantidad de variedad en sus puestos y las ofertas que allí se pueden encontrar, mientras que los más veteranos acuden con devoción para buscar las mejores oportunidades, a tan sólo media hora de Vigo. Muchos vigueses se acercan cada miércoles a la ciudad portuguesa para realizar sus compras o, simplemente, pasear y observar la cantidad de elementos a la venta en cada uno de sus pasillos. Incluso, visitantes extranjeros, que recomendados por amigos y conocidos, se acercaban al mercado: “El dueño de la casa donde nos hospedamos en Pontevedra nos dijo que viniésemos a ver la feria, que está muy chula”, admitió Rocío Artea, llegada de Argentina. También franceses con familiares en el país luso, que aprovechan sus vacaciones para vivir el mercadillo. “Tiene mucho material para comprar, venimos todos los años en nuestras vacaciones, aunque vivamos en Francia", aseguraron las jóvenes Camile y Casandra.

Sin embargo, cada miércoles el acceso desde Vigo puede ser complicado debido a las caravanas de coches que se producen en dirección a Valença. Entre la fortaleza y el mercado la ciudad portuguesa amplía su población y encontrar aparcamiento si se viaja en coche puede llegar a ser complicado, a pesar de una gran explanada enfrente de la feria que se copa de vehículos con los primeros visitantes al mercado.