Eloymar-Tranvías se hace con la gran mayoría de los parkings de Vigo
La compañía ya gestiona ocho estacionamientos tras sumar el de A Laxe, de Zona Franca, reabierto tras dejar de ser robotizado y reconvertirse en convencional
La UTE integrada por Welgood Eloymar y Tranvías Eléctricos de Vigo se ha convertido en la titular de la mayoría absoluta de los aparcamientos de titularidad pública de la ciudad tras conseguir también la gestión del parking de A LAxe, del Consorcio Zona Franca, que ayer reabrió sus puertas tras siete meses de obras de reforma con una inversión de 1,6 millones. Dicho estacionamiento ha dejado de ser robotizado para convertirse en convencional, con menos plazas que antes, aunque ahora solo 184, cinco para recarga eléctrica. También ha cambiado de nombre: desde ahora se denomina Náutico-Cíes, y de gestión, que pasa de Zona Franca a la que a partir de ahora es la primera empresa de aparcamientos.
Eloy García, máximo responsable de Eloymar y al mismo tiempo actual presidente de Conxemar, reconoce que la idea de la UTE con Tranvías es continuar expandiéndose por Vigo. De momento, son ocho ya los que están bajo su mano: plaza de Independencia, Pintor Colmeiro, Urzaiz, Areal, Calvario, Policarpo Sanz, Castelao (el anterior adquirido) y desde ayer Náutico-Cíes. Quedarían de momento fuera de su ámbito otros seis Venezuela, Fernando el Católico, Rosalía de Castro, plaza de Portugal, plaza del Rey y calle Lalín, donde los antiguos juzgados. “Esta es nuestra idea, continuar consiguiendo la gestión de los parkings que podamos”, señaló Eloy García, quien aseguró que la reforma del robotizado ha dejado un estacionamiento “espectacular, que merece la pena verlo", incluyendo las pinturas que decoran el espacio, obra del artista Powoan. Recientemente, el tribunal dictaminó que tres de sus instalaciones tendrían que perder la concesión municipal al haber vulnerado las condiciones del concurso, en concreto en el tamaño de las plazas, inferiores a lo exigido. Aunque el gobierno local todavía no ha tomado una decisión, el empresario parece poco preocupado. “Vamos a recurrir”, zanjó.
El aparcamiento ganó un acceso peatonal por la rampa, enfrente a Carral, y cuenta con última tecnología de aparcamientos (entrada y salida sin necesidad de ticket y guiado plaza a plaza). Como es conocido, se cerró porque la obsolescencia de los equipos robóticos y de sus sistemas de control comprometían su correcto funcionamiento. Así que Zona Franca inició el proceso para su transformación en un parking convencional. La reforma obligó al desmontaje de todos los sistemas automáticos de almacenamiento existentes, ascensores e instalaciones para reconvertirse en un parking convencional, donde se aprovecharon los dos niveles para aparcamiento de vehículos, con pasillos de circulación y rampas de comunicación entre sótanos para movilidad de los vehículos.
El súper parking
Zona Franca es titular del parking Náutico-Cíes y de la plaza de la Estrella. Y todavía tiene como proyecto por iniciar unir ambos con un tercero bajo los jardines de las Avenidas y Montero Ríos que supondría en total 1.200 plazas, suficientes para todo el centro. La idea sigue viva y depende de la negociación con la Autoridad Portuaria, que ya dio vía libre a ampliar la concesión de A Laxe, que finalizaba en 2025, hasta 2040.
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