Se duplican en Vigo los accidentes con patinetes: 42 siniestros con 31 heridos en un año

El auge de los patinetes eléctricos como nueva forma de movilidad en la ciudad conlleva también que aumenten los accidentes relacionados con este tipo de vehículos. Así lo reflejan los datos recogidos por la Policía Local, que muestran como el año pasado se produjeron 42 accidentes con vehículos de movilidad personal (VMP), se trata de más del doble que los que había en los años 2019 y 2020, así como un 35% más que en 2021.

A pesar de todo, estos 42 accidentes solo supusieron el 2% de la cifra total registrada en la ciudad en el año 2022, que ascendió hasta los 2038. De ellos, la mitad, 1.063, se saldaron con heridos leves, mientras que otros 34 supusieron daños de gravedad y en todo el año hubo dos fallecidos en el municipio. En cuanto a los patinetes eléctricos, 29 de los accidentes se saldaron con heridos leves, casi el 70%, un porcentaje mayor al del resto de vehículos. Además, la tendencia es creciente, ya que en 2021 los heridos leves fueron 24, en 2020 se notificaron 12 y en 2019 tan solo 10, un tercio de los actuales.

Por otro lado, tan solo hubo dos heridos graves, mientras que en los dos años anteriores solo hubo uno cada año, sin notificarse ninguno desde 2019 en atrás. Además, aún no se ha registrado ningún fallecido por accidentes con vehículos de movilidad personal implicados hasta la fecha.

Con tan solo un 2% de todos los accidentes, Vigo se sitúa por debajo de la media nacional, ya que los patinetes eléctricos están involucrados en más del 4% de siniestros con víctimas en zonas urbanas, según un estudio de Formaster, Asociación Profesional de Empresas Formadoras en Logística, Transporte y Seguridad Vial.

Todo ello en un contexto en que cada vez es más frecuente el uso de este tipo de vehículos, especialmente en el carril bici, que en zonas como Coia, Camelias y Pizarro mueve 20.000 personas al mes, con medias por encima del medio millar de vehículos en días laborables.

Su uso se ha extendido todavía más desde su regulación el pasado año, cuando el Concello aprobó la ordenanza sobre los vehículos de movilidad personal. Entre las principales medidas de esta normativa se encuentra el uso obligatorio del casco, disponer de elementos reflectantes o la limitación de la velocidad a 25 kilómetros por hora. Además, prohíbe el uso de los patinetes eléctricos en las aceras y clarifica que deben circular por el carril bici o por la calzada junto a los demás vehículos, aunque establece excepciones como la restricción de su uso en las grandes avenidas de la ciudad como la de Madrid o Gran Vía.

Para dar a conocer estas normas, los propios usuarios colaboraron con el Concello. En concreto, la asociación Vigo VMP se encargó de dar información a pie de calle sobre la regulación de los patinetes.

“Al principio esto era una selva, pero hemos mejorado mucho en seguridad”

Ricardo Martínez, miembro de la directiva de la asociación de usuarios Vigo VMP asegura que en Vigo no hay “grandes problemas” respecto a este tipo de vehículos en materia de seguridad vial. Si bien reconoce que “al principio esto era una selva, chavales yendo por la acera sin casco, sin prenda reflectante por la noche, dos en un mismo patinete”, considera que en los últimos años “hemos mejorado mucho en seguridad”.

En este sentido, valora la implementación de la ordenanza municipal para regular su uso. Según Martínez, esta normativa ha tenido un impacto positivo en la seguridad, ya que ha llevado a una mayor concienciación por parte de los usuarios. No obstante, reconoce que aún existen desafíos, como la falta de infraestructuras adecuadas.

Si bien la ordenanza permite utilizar el carril bici o la calzada, explica que esta elección es un tema que genera debate entre los usuarios de VMP en Vigo. Algunos usuarios inexpertos pueden sentirse más seguros en el carril bici, mientras que aquellos con más experiencia optan más por la calzada. Martínez señala que uno de los principales riesgos de utilizar el carril bici es que muchos peatones no lo respetan de igual manera que la calzada. “Encontramos a gente con el carrito del niño, runners que van corriendo por él, el trazado puede tener ángulos muertos, a veces es más seguro ir por la calzada”, explica.

Con todo, Martínez apoya la idea de crear una red de carriles bici para favorecer la circulación en la ciudad. Aunque se han proyectado nuevos tramos, reconoce que la falta de infraestructura puede disuadir a algunos usuarios de utilizar los VMP, especialmente en una ciudad con un alto volumen de tráfico como Vigo.

Por otro lado, desde la asociación critican que el Concello prohíba la circulación de monociclos eléctricos. “Hemos pedido explicaciones y no recibimos respuesta alguna, Vigo es la única ciudad del territorio nacional que veta a los monociclos, sin argumentos técnicos ni estadísticas de siniestrabilidad que lo justifique”, lamenta.