Detenida una familia en Vigo por dirigir una red de tráfico de inmigrantes

El juzgado de Instrucción número 5 de Vigo acordó ayer la puesta en libertad pero investigados por un presunto delito de favorecimiento de la inmigración irregular a los cuatro supuestos cabecillas de una red guatemalteca que fueron detenidos por la Policía en un golpe a una trama en la que también hay 21 personas investigadas.

Se trata de tres mujeres, y un hombre, todos ellos vinculados familiarmente y al menos dos con situación regular en España. Los arrestados residían en Vigo y trabajaban como personal de limpieza en el caso de las mujeres y en la construcción por parte del hombre. Los arrestados negaron cualquier vinculación a una trama tras declarar en dependencias judiciales. El resto de investigados quedaron libres en dependencias de la Comisaría.

Fuentes policiales informaron de que la investigación se inició en octubre del año pasado tras tener conocimiento de la existencia en la ciudad de un grupo de ciudadanos guatemaltecos que, utilizando cartas de invitación, podría estar favoreciendo la inmigración irregular de compatriotas suyos.

Dicho entramado, dice la Policía, estaba formado por una cúpula, asentada en Vigo, además de una red de captadores en Guatemala, y diversos responsables locales en las principales ciudades españolas.

Para iniciar los trámites, la organización les cobraba a las víctimas 3.000 euros por anticipado en su país de origen, además de anticiparles otros 600 euros en efectivo para no levantar sospechas al cruzar la frontera como turistas.

Las mismas fuentes indicaron que un responsable de la organización iba a recoger a estas personas al aeropuerto y nada más cruzar la aduana les retiraba los 600 euros que les habían facilitado, además de exigirles 1.300 por la realización de la carta de invitación.

La deuda nunca era inferior a los 6.000 euros, llegando incluso a superar los 8.000, para lo cual obligaban a las víctimas a emplearse ilegalmente en labores de servicio doméstico y jardinería. La organización contaba con la colaboración interesada de ciudadanos españoles y otros extranjeros residentes legales en España, quienes tramitaban las cartas de invitación.

Del mismo modo, dice la Policía, les aleccionaban en su país de origen sobre cómo debían de actuar y comportarse ante las preguntas del puesto fronterizo.

Posteriormente, en Vigo se inscribían en el padrón de habitantes utilizando los domicilios de los colaboradores, logrando con ello acceder a los servicios básicos como sanidad pública y servicios sociales, así como para permitir su futura regularización. La actividad generaba altos beneficios.

El operativo fue llevado a cabo por el grupo de Ucrif de la Brigada de la Policía Extranjería y Fronteras.

"Vinimos a españa a buscarnos un futuro, no hay trama ninguna", alegan

Los presuntos cabecillas de esta organización pasaron ayer a primera hora de la mañana ante el juzgado de Instrucción 5 en funciones de guarda. Todo s ellos contestaron a las preguntas de la jueza y el fiscal, negando en todo momento cualquier vinculación con una organización criminal.

Fuentes del caso confirmaron que los arrestados declararon que "vinimos a España a buscarnos la vida, nada más" y reconocieron que se trajeron a familiares para encontrar un futuro mejor. Al no estar todos en situación irregular, reconocieron haber cometido una infracción administrativa, pero negaron haber cobrado cantidad alguna por hacer cartas de invitación, y aseguraron no existir constancia de dichos pagos.