Desalojan un edificio de Serafín Avendaño en Vigo por grietas causadas por una obra anexa

Hace meses que los vecinos del número 5 de Serafín Avendaño venían sufriendo desperfectos en sus casas (grietas, desprendimiento de parqué..) pero hasta este miércoles nadie había tomado cartas en el asunto. Así lo cuentan los residentes, dos familias que viven en el tercero y quinto y que junto con las oficinas del bajo y el primero conforman la propiedad del inmueble. Aseguran que aunque la edificación es antigua, las viviendas están reformadas y que los problemas llegaron con las obras de un aparcamiento que están construyendo en el solar contiguo.

“El edificio se había movido otras veces", afirmaba Paula, que vive con en el quinto con su marido y tres hijos de dos, cuatro y ocho años.

El miércoles poco antes de las diez de la mañana, eran la Policía Local y los bomberos quienes alertaban de que debían desalojar el edificio. “Yo estaba en casa trabajando y llamaron a mi puerta, ni me había enterado de que se había desprendido parte de la cornisa de la fachada", aseguraba Guillermo, otro de los residentes.

Fue un aviso desde la calle el que movilizó a los efectivos del parque de Teis. Tras examinar la fachada y observar, además de la cornisa desprendida, la multitud de grietas, se dio aviso a los técnicos, mientras que la Policía Local por precaución decidió llevar a cabo el desalojo.

Fuentes municipales confirmaron que los desprendimientos de la fachada principal se debieron a la obra del solar anexo y que tras observar el estado del edificio se monitorizó para ver su evolución en los próximos días.

La constructora se encargó de buscar una alternativa provisional de realojo para las dos familias, una en un hotel y otra en una vivienda, al tiempo que se apuntaló el inmueble y se colocaron testigos.

Durante la tarde, los residentes pudieron entrar a sus casas, acompañados por la Policía y personal de la constructora, a recoger sus enseres, aunque todavía no saben cuándo podrán volver a sus casas. “Nuestra vivienda está totalmente reformada y cuando empezaron a excavar comenzaron a salir grietas, la isla se nos rajó y se levantó el parqué”, explicaba Paula.

En el piso de Guillermo también hay daños “de hecho cuando subimos a por nuestras cosas había grietas nuevas”.

Aunque la constructora aseguró que desde el principio tenían vigilado el edificio para evitar riesgos, los residentes no se explican entonces por qué se desprendió la fachada y cómo es que cada día surgen nuevas grietas.

Mientras Paula reconocía estar asustada, después de haber visto lo que ha pasado recientemente en Teruel (donde se derrumbó un edificio), Guillermo afirmaba que aunque hoy les dijeran que no había peligro “de momento no sé si regresaremos, tal y como está el edificio". La afectación es visible desde el exterior, que continúa vallado.

Indignación con la constructora: “No nos hicieron caso en meses”

A las puertas del edificio, los afectados pedían explicaciones a los representantes de la empresa que lleva a cabo las obras del aparcamiento. “Llevamos meses con reclamaciones y requerimientos pero hasta ahora no nos hicieron caso, ni una respuesta porque decían que ellos no eran responsables”, afirmaban. “Tenemos desperfectos que necesitan un arreglo urgente”, añadían.

Por su parte, desde la constructora se aseguraba que el edificio no se había desplazado y no tenía riesgo de colapso ya que los movimientos no han afectado a los cimientos y que creen que en un par de días podrán regresar a sus casas. Sin embargo, hay más que dudas razonables entre los afectados, “no solo no han atendido a nuestras advertencias y denuncias sino que cada vez hay más grietas". Serán los testigos colocados los que den respuesta.